El Nacional
NUEVA YORK.-La estudiante dominicana Carolina Torres, quien asistió como invitada a varias de las actividades celebradas en Washington con motivo de la juramentación del nuevo presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, dijo que obtuvo muy buena experiencia, sobre todo por el discurso pronunciado por el mandatario en el cual resaltó que todos los seres humanos tienen el mismo valor.
Mi experiencia en Washington, D. C. fue extraordinaria porque fue un viaje memorable. Me siento muy feliz y contenta por ser testigo de este evento tan histórico y ver con mis propios ojos tantas personas juntas por la misma razón, expresa Carolina, de 15 años de edad, estudiante de la escuela secundaria Hill Crest, en Queens.
Dijo que nunca pensó que iba a estar tan cerca del presidente Obama o ver personas tan importantes, y precisó que durante los cinco días que estuvo en Washington la pasó de maravilla, pues conocí historiadores como Colin Powell (ex secretario de Defensa), Al Gore (ex vicepresidente de los Estados Unidos), Lisa Ling y celebridades.
Agregó que además de ver miles de gente con sus banderas y felices de estar allí con nuestro nuevo presidente Barack Obama a pesar de que la temperatura era muy baja, pude ver el Presidente en la celebración de la pre inauguración.
Indicó que uno de los aspectos que más le encantó fue ver a Obama como compartía con su familia, pero más me gustó el discurso que dio.
Sobre el discurso improvisado del nuevo gobernante estadounidense, Carolina dijo que la parte que más le atrajo fue cuando dijo que todo es posible en América.
La estudiante nativa de la ciudad de Santiago, al norte de la República Dominicana, es hija de Ramona y Rafael Torres, y vino a vivir a los Estados Unidos cuando era una niña. Solo tiene una hermanita: Catheryn y además de ser estudiante sobresaliente es voluntaria del Queens Hospital Center y participa en deportes como golf, baloncesto, softbol, boliche, natación y tenis.
Su padre Rafael, nativo de San José de las Matas, es taxista sin medallón mientras que su madre Ramona, oriunda de Puerto Plata y criada en Santiago, labora como asistente de enfermería en esta urbe.
