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Eufemismo o la otra forma de llamar los seres y las cosas

Eufemismo  o la otra forma de llamar los seres y las cosas

Los eufemismos suelen ser palabras muy útiles para salvar determinadas situaciones del habla cotidiana. Están presentes en personas de todas las clases sociales y de todos los niveles de lengua. Las palabras y locuciones se usan de acuerdo al interlocutor frente al que se encuentre el hablante. Se recurre al eufemismo para evitar una palabra que podría resultar malsonante, aun siendo ésta indicada para referir la cosa o acción de que se trate.

 
Frente al médico, por ejemplo, pocos dirán “mear”, si disponen del sinónimo suave “orinar” y de expresiones eufemísticas como “hacer pipí”, “ir al baño”, “hacer agua”.
El prefijo /eu/ procede del griego y significa bien. Ejemplo eufonía: sonoridad agradable de la palabra. Eu tiene una connotación de agradable, bueno…

 
Le cederé la palabra al maestro Fernando Lázaro Carreter, autor del Diccionario de términos filológicos, quien define eufemismo de esta manera:
“Proceso muy frecuente que conduce a evitar la palabra con que se designa algo molesto, sucio, inoportuno, etc., sustituyéndola por otra expresión más agradable.

 

Según Carnoy (1927), el eufemismo puede producirse por las siguientes causas: a) deseo de adaptarse a una circunstancia en la cual la palabra propia resultaría demasiado plebeya o trivial; esto mueve a utilizar cabello por pelo, seno por pecho, baño por retrete, etc.; b)ennoblecimiento de la propia personalidad; así, un músico se hace llamar profesor, o una comadrona, profesora en partos; c) respeto cortés hacia aquel a quien se habla: hay eufemismo de dudoso gusto cuando se pregunta a alguien por su señora, en lugar de su mujer; d) necesidad de atenuar una evocación penosa: llamamos invidentes a los ciegos, impedidos a personas que no pueden valerse por sí mismas (cojos, mancos, paralíticos), económicamente débiles a los pobres, etc.; e) tabú social, religioso, moral, etc.; ello induce a llamar embriagado al borracho, a jurar por interjecciones como pardiez, diantre, rediez, etc.; a designar como amiga a la amante…Un tabú supersticioso movió a los griegos a llamar ‘benévolas’ a las furias, y, en España, a aludir a la culebra con el vocablo bicha”. (Carreter, pág. 174).

 
Como el vocablo eufemístico oculta una realidad, las palabras que designan los genitales son las más propicias para su aplicación. Pocos emplean los nombres técnicos vulva y pene, pero todos manejamos una lista de “apodos”, algunos groseros, y por necesidad unos eufemismos como: cosita, pajarito, bimbolo, y en un ambiente más riguroso “mi parte” o “su parte”.

 
Economistas y demógrafos son campeones en la creación de eufemismos: población más vulnerable (más pobre), zonas deprimidas (lugar donde falta todo), crecimiento negativo (pérdida, baja), descapitalización (quiebra), envejecientes (personas mayores, viejas), adultos mayores (persona de edad avanzada). Con el eufemismo “capitalización” fueron vendidas las empresas del Estado, sin que se usara el verbo vender.

 
La creatividad de las ONG resulta evidente en la búsqueda de eufemismos: trabajadora sexual (prostituta, meretriz o cuero). Para personas con inclinaciones sexuales diferentes al común ya se estableció que tienen “otra preferencia sexual”. Al vocablo “homosexual”, que no es malsonante como “maricón”, se ha buscado una lista de eufemismos: gay, bisexual, transgénero,…A quien le falta un ojo no es tuerto, sino deficiente visual.
Los nombres de personas que empiezan con la sílaba Eu, de acuerdo a su origen griego, tienen un significado agradable: Eulogio, Eufemia, Eurípides, Eurídice.
Para su entretenimiento le dejo este grupo de palabras: eufonía: sonidos agradables; eutanasia: etimológicamente “bien morir”; eugenesia: “buen origen, nacer”; euforia: etimológicamente “bien llevar”; eucalipto: significa “bien oculto”; eucaristía: significa bien agradar (agradecimiento); eutrapelia: “broma o crítica amable”; eucariota: “célula bien formada como una nuez”; eutrofia: significa “buena nutrición”.
Estamos en la era del eufemismo.

El Nacional

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