Montevideo, 20 de Septiembre EFE.- El presidente uruguayo, José Mujica, afirmó hoy que Europa, que vive un proceso de “estancamiento”, no está a la altura que le corresponde para operar como “mediadora de paz” mientras que América Latina se está asomando en ese terreno con “un grado estatura que no encontramos en el mundo desarrollado”. Mujica, un exguerrillero tupamaro de 79 años, criticó duramente el “aventurerismo militar” que tienen algunos países de la Unión Europea (UE) y lamentó también la imposición de sanciones económicas como las que se han dado a Rusia recientemente y que sólo sirven para que “los más débiles lo pasen mal”.
“Europa no está a la altura de tener una conducción política que opere como mediadora y organizadora de la paz. Por aquí y por allá cae en gestos de aventurerismo militarista como lo sucedido en Libia, Afganistán e Irak que después de un largo período nos encontramos con sociedades que están mucho peor que antes”, afirmó el mandatario en declaraciones recogidas por la página web de la Presidencia uruguaya. El mandatario, reconocido internacionalmente por su austero modo de vida y su carácter desenfadado, apuntó que desde el Viejo Continente no parece haber “conciencia de eso” y por eso “no se sale de ese círculo vicioso”.
“Europa tiene estancamiento económico y, en mi humilde opinión, no está en relación a lo que representa como cultura, historia, experiencia acumulada y como núcleo económico”, añadió. En ese sentido, apuntó que Latinoamérica por otro lado, con sus esfuerzos por lograr la paz en conflictos como el de Colombia, está dando un ejemplo opuesto al del Viejo Continente, que no actúa “como freno a los conflictos”. Así, Mujica reflexionó sobre el conflicto de Ucrania y las sanciones impuestas a Rusia por la UE por su intervención en ese país.
“Allí se tiró abajo un Gobierno constitucional, se entró en conflictos nacionales, disputas territoriales y se levanta el fantasma de las sanciones económicas”, lamentó el presidente. “Hacemos memoria y hubo sanciones económicas contra Franco, Mussolini, Stalin. Nunca sirvieron para otra cosa que los más débiles de esas sociedades pasaran mal. Hasta hoy tenemos el bloqueo de Cuba y uno se pregunta hasta cuándo vamos a seguir en el mundo moderno con tantos recursos y semejante miopía que termina multiplicando los problemas”, criticó. EFE
