ANDRES, BOCA CHICA. Enfrentamientos verbales entre dueños de pequeños negocios que operan en la playa de Boca Chica, la venta a precios prohibitivos de los servicios diversos de comidas a los visitantes nacionales y extranjeros y la falta de intervención por parte de las autoridades de los diferentes organismos e instituciones oficiales, está ahuyentando a los turistas de la zona, que deciden irse a otros lugares, trayendo como consecuencia perjuicio a la comunidad.
Con frecuencia se producen peleas entre propietarios de cafeterías y pequeños restaurantes que operan en la zona conocida como El Parqueo Municipal y los llamados figones, o intermediarios entre los negocios y los clientes, por alterar hasta en un cien por ciento los precios de los servicios de los diversos platos y las bebidas alcohólicas consumidas en los establecimientos, provocando airadas protestas de los parroquianos.
Pese al caos que practicamente a diario se produce en el lugar a consecuencia de los conflictos entre los propios negociantes, unos que auspician los llamados intermediarios y otros que se oponen a su existencia, es muy notoria la falta de intervención por las autoridades municipales, la Policía Nacional, Politur, Ministerio de Turismo, Marina de Guerra y otras instituciones oficiales que inciden en la zona de Boca Chica.
Es innumerable la cantidad de quejas que diariamente se producen por parte de clientes, que alegan ser abusados por parte de dueños de negocios y los llamados figones, teniendo que pagar elevadas sumas de dinero por consumir dos o tres pescados, dos o tres cervezas o algunos tragos, abandonando la playa, diciendo que jamas vuelven a Boca Chica por las estafas.
En el lugar operan actualmente tres organizadores de pequeños comerciantes que no se ponen de acuerdo para evitar que Boca Chica y sus munícipes sigan siendo afectada por la poca afluencia de visitantes a consecuencia de los abusos que se producen por los exagerados precios de los servicios de comidas.
Son ellas la Asociación de Buhoneros Turísticos, que se dedica a la venta de collares, tabacos y otras especies, Asociación de Masajistas y Peinadoras, integrada por un gran porcentaje de mujeres haitianas que hostigan a los parroquianos, y el Sindicato de Trabajadores y Vendedores Playeros.
El pasado martes, el señor Pancracio Sosa, quien preside el Sindicato de Trabajadores y Vendedores Playeros, denuncio que fue agredido por el señor Jesús Armando Terrero Severino, dueño de uno de los pequeños restaurantes que funcionan en el Parqueo Municipal, al disponer sanción contra tres trabajadores, de quienes varios clientes se quejaron de haber sido estafados con los precios de los servicios de comida.