Al ver al derecho Nelson Figueroa en el box lanzando serpentinas que denotaban un festín y luego escuchar los cañonazos del intermedista Julio Lugo ante el pitcheo de los Gigantes del Cibao, pensé que se había adelantado la celebración del Año Nuevo.
Muy bien pudo haber sido así, pero en verdad, eran simplemente los aportes de estos dos jugadores a la cadena de ocho triunfos seguidos que llevan los Leones del Escogido que anoche superaron 4 carreras por 1 a los Nordestanos en la continuación del Todos contra todos de la pelota otoño-invernal dominicana.
Figueroa trabajó durante siete y dos tercios, dominantes que reafirmaron su estelaridad en el béisbol invernal, aunque no faltó un parroquiano de los Gigantes, Erick Almonte, que intentó aguar la fiesta al pegar tres indiscutibles que no hicieron blanco de carreras.
El derecho importado permitió siete hits en el encuentro, una carrera y pasó por el ponche a seis bateadores.
Vamos a seguir esta ruta, ganar partidos como equipo, dijo Figueroa al concluir el encuentro, tercero que gana el Escogido para mantenerse invicto en la serie.
Agregó que no tuvo una formula mágica en el juego contra los Gigantes y que los bateadores saben que él siempre vendrá por la zona.
En el partido no estuvieron disponibles los carceleros de la octava y novena entrada, José Cabrera y Fernando Rodney, pero el zurdo Nelson Payano hizo las veces de cerrador y trabajó el noveno sin permitir libertades, La derrota fue para John Halama, quien tiró cinco entradas de tres carreras y ocho hits.
Lugo fue el mejor a la ofensiva al pegar de 4-3, con un doble, una anotada y una empujada; Denis Phipps consiguió dos sencillos; Jimmy Paredes se fue de 3-2 para unirse a los tres sencillos de Almonte.
EN NUEMRO
4-3
Bateo Julio Lugo
Para ser parte importante del octavo triunfo seguido de los Leones del Escogido y tercero al hilo en el Todos contra todos.
Que se dijo
Era el momento que esperaba para aportar
Julio Lugo, intermedista.
No tengo miedo en salir, tenemos buen relevo
Nelson Figueroa
Aquí se está jugando en armonía y ahí está… esa es la clave de todo
Julio Lugo