CENTRAL ISLIP, Nueva York, EE.UU, (AP).- Era una trampa, ejecutada con errores pero con resultados sangrientos.
En documentos presentados recientemente ante la corte, los fiscales dijeron que los cuatro jóvenes que fueron masacrados en abril en un parque de Long Island fueron llevados al lugar por dos mujeres relacionadas a la pandilla MS-13, que cazaba a rivales y a quienes percibía como enemigos.
Una vez ahí, los jóvenes – algunos todavía en la escuela secundaria – fueron rodeados por más de una decena de miembros de la pandilla, quienes los atacaron con machetes, cuchillos y toletes “en un horrendo frenesí de violencia”, de acuerdo con documentos de la corte a los que Newsday (http://nwsdy.li/2taibXf ) tuvo acceso.
Un quinto joven que acompañó a las víctimas al parque salió corriendo y logró escapar, señaló la corte en un memorando.
La semana pasada los fiscales acusaron discretamente a cuatro personas por los homicidios, pero revelaron pocos detalles del caso.
Los tres de los acusados que fueron nombrados en los documentos dados a conocer el lunes son Alexis Hernández, Santis Leonel Ortiz Flores y Omar Antonio Villalta.
No se reveló la identidad de un cuarto acusado, y la fiscalía federal no indicó si ese sospechoso está detenido o sigue prófugo.
La masacre de abril en Central Islip fue parte de una serie de asesinatos en Long Island atribuidos a la Mara Salvatrucha o MS-13, la letal pandilla de orígenes centroamericanos. Los decesos atrajeron atención internacional y fueron el tema de una audiencia en el Congreso, así como de tuits de la Casa Blanca. El secretario de Justicia también visitó Long Island.
En una carta dirigida a la corte que obtuvo Newsday, los fiscales federales señalaron que las cuatro víctimas que fueron encontradas sin vida en abril, además de la persona que escapó, “habían sido señaladas para morir simplemente porque se sospechaba que le habían faltado al respeto a la MS-13 y eran miembros de una pandilla rival”.
Las dos mujeres relacionadas a la pandilla recibieron la instrucción de llevar a las víctimas al parque comunitario, escribieron los fiscales.
“Cuando las mujeres llegaron al parque, condujeron a los cinco individuos a un área boscosa … y enviaron a varios miembros de la MS-13 un mensaje de texto con su ubicación”, de acuerdo al memorando.
Entre las víctimas se encuentran Justin Llivicura, de 16 años y residente de East Patchogue; Jorge Tigre, de 18 años, quien vivía en Bellport; Michael Lopez Banegas, de 20 años y residente de Brentwood; y Jefferson Villalobos, de 18 años y residente de Pompano Beach, Florida, quien en ese momento se encontraba en Long Island para visitar a su primo Banegas.
Familiares de las víctimas han negado que cualquiera de ellos perteneciera a una pandilla.
