Mucho más que una Copa Mundial
El Mundial de Fútbol es mucho más que una competencia futbolística que, cada cuatro años disputan las 32 mejores selecciones del planeta.
El certamen deportivo que mayor audiencia concentra, paraliza el mundo entero que sigue con interés el desarrollo de los 64 encuentros del programa oficial.
Esto es así ahora y siempre. Lo que comenzó en el año 1930 se ha ido incrementado progresivamente y, a partir de la edición disputada en Francia en 1998, el interés por los Mundiales de Fútbol se elevó a niveles extraordinarios debido a que el número de participantes pasó de veinticuatro selecciones a treinta y dos.
Al término de más de treinta días de intensa actividad futbolística en la que compiten las mejores selecciones con los mejores jugadores del planeta en los escenarios más modernos y apropiados construidos y/remodelados especialmente para la justa, se corona un nuevo campeón que, durante los próximos cuatro años reinará en el mundo del fútbol.
Esta es la sinopsis del aspecto deportivo de la Copa Mundial de la FIFA pero, como puntualizamos en el título de nuestra entrega, un Mundial es mucho más que eso.
Obvio que sí.
El evento deportivo monotemático que atrae audiencias televisivas sorprendentes representa una plataforma ideal para que diferentes productos y marcas multinacionales se exhiban y para ello hacen inversiones millonarias en publicidad.
No es casualidad que, en el ceremonial de la premiación tanto del tercer puesto como en el de la gran final hayan aparecido las atractivas azafatas de Emirates (uno de los patrocinadores oficiales de la FIFA) o, que las dos selecciones finalistas lucieran uniformes de la multinacional de la indumentaria deportiva que desde 1970 está asociada a la FIFA.
Es oportuno recordar que ambas instituciones han prolongado su alianza estratégica hasta el 2030. La relación entre Adidas y FIFA representa la alianza más exitosa en la historia del marketing deportivo.
Lo que tímidamente comenzó en los años 1970 cuando el Club Leeds United F.C. de Inglaterra decidió lucir el nombre de la marca Admiral que lo uniformaba en su camiseta, se convirtió en un multimillonario negocio.
Para que tengan una idea del negocio que el fútbol representa para las grandes marcas de la indumentaria deportiva, citamos la proyección de ventas que ha previsto la reconocida marca alemana para el año fiscal 2014. La cifra es de 2.700 millones de euros, es decir un diez por ciento más que el año pasado.
Para lograr su objetivo Adidas paga a la Federación Alemana de Futbol -la nueva campeona del Mundo- 55 millones de euros por temporadas, más múltiples variables por títulos obtenidos.
La Federación Española, por su parte, recibe 40 millones, en tanto que Argentina, hasta antes del Mundial, recibía sólo 11 millones de euros y por si esto fuera poco, acaban de comprometerse con el Manchester United por las próximas diez temporadas pagándole 94 millones de euros por año.
La competencia, es decir la marca que tiene sede en Oregón (USA) desde el año 1994, le paga a la Federación Francesa de Fútbol 41 millones de euros por temporada, a la Confederación Brasileña de Fútbol 22 millones y, a la selección de los Países Bajos (Holanda) poco mas de 12 millones de euros por año.
Por razones de espacio, en esta ocasión llegamos hasta aquí pero, nos comprometemos a ampliar sobre el tema de que, el Mundial es mucho más que la Copa….
