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“El Imperfecto Plan” de Robertico
Indiscutiblemente que nuestra deseada y codiciada Ley de Cine en el país, ha dado muchos beneficios a los hacedores de cintas cinematográficas y todos aquellos que se ven envueltos en las mismas.

Pero esto cuantiosos beneficios están provocando que muchos directores y productores continúen haciendo sus películas al vapor, para solo recibir los chelitos, mientras que la calidad de las propuestas que son llevadas a la pantalla grande carecen de profesionalismo y dedicación.

Esto lo digo luego de ver la primera película del año de Roberto Ángel Salcedo, mejor conocido como Robertico.
“El plan perfecto” es el nombre que lleva por título este filme que yo responsablemente le llamaría “El Imperfecto Plan”, porque las imperfecciones acaparan la cinta de principio a fin.

Yo que fui partícipe de la premier el lunes de la semana pasada, pude ver que lo que ellos han querido llamar una “comedia de acción”, no causa risa para ser comedia y mucho, pero mucho menos, es acción, por lo que ni se en que género encajar esta película.

Como de costumbre, Robertico recurrió a los chistes de siempre, dejando claro que no había un guion estructurado. Eso fue como vamos a ponernos frente a las cámaras y que salga cualquier cosa y eso salió.
La trama que gira entorno a seis amigos, no puede ser más fastidiosa, pues cada personaje no para de decir lo mismo, aunque sea dicho en otras palabras.

Aquel que quiere ser cantante y todo lo que dicen los demás él lo quiere convertir en una canción, los evangélicos que no paran de rezar la película completa, el viejito mujeriego y el gordito que nada más habla de que tiene hambre, son solo parte de los personajes que se pueden ver en la hora y treinta minutos que dura la película, la cual provoca que cualquiera quiera salir antes de la sala de cine.

Y aunque muchos productores y directores dicen que los periodistas solo se dedican acabar las películas, lamentablemente si lo que están presentando al público es malo, de baja calidad, al pueblo no se le puede vender una historia distinta a lo que proyectan.

Estudien, prepárense, tómense su tiempo para hacer las películas, dediquen más tiempo a la elaboración del guion, busquen una persona que sepa escribir guion, no se ponga usted porque querer ser todólogo hacer todo, asuma un rol y deje a los demás hacer su trabajo.

No vean esta Ley de Cine como algo solo para beneficio propio, inviertan en sus producciones, no vaya ser cosa que el público se desencante y el cine dominicano quede en el olvido.

El Nacional

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