Domingo Bautista
La semana pasada tuve la oportunidad de recibir en mi programa radial “Panorama Farandulero” al versátil amigo Domingo Bautista, con quien sostuve una entrevista sin desperdicios y por eso a través de esta columna he querido resaltar algunos puntos que conversé con él.
Puede resultar increíble que después de que Domingo Bautista se adueñara de las tardes del país con su espacio “La Súper Revista”, él me expresará que hacer televisión se tornó en algo no agradable ni satisfactorio para él, sino que ya era como un problema, que le cargaba mucha tensiones, depresiones y estrés, pues me comentaba que hacer televisión en estos tiempos requiere de una “voluntad de hierro y de una disposición por encima de lo normal”.
Bautista fue más allá y dijo que la tv está en quiebra y que solo aquellos que tienen algún grupo con poder económico puede mantener un proyecto televisivo.
Domingo, quien inició de la mano del empresario Don Adriano Rodríguez , me comentó que su rol en la tv era animar y que para eso es que está preparado, no como está el negocio ahora, que también tienes que salir a buscar tus anunciantes, “Don Adriano era el empresario y yo el talento”.
Bautista también lamentó que los cambios ya los productores no exijan formación a sus talentos, sino que se busca figuras que simplemente el público consuma y sin titubear me dijo: “Yo no sé si hoy en día un tipo de la grandeza y el talento de Freddy Beras Goico, que apareciera, tendría éxito, yo no creo que el público valorice”.
Pero Domingo en la pantalla chica no solo trascendió por su talento, sino que su forma de vestir también causó mucho impacto para ese entonces, pues los caballeros no se atrevían a salir de los colores tradicionales para hombres, por lo que cuando Domingo Bautista se presentaba vestido con un traje rojo, verde, amarrillo y hasta rosado, las críticas le llovían, pero así rompió por completo con los parámetros de vestimentas de aquel entonces.
Bautista nos contó que esos de los colores de Domingo lo usó como una expresión de rebeldía y rechazo a falsedades, estereotipos e hipocresía, pues destacó que aunque aparezcan hombres bien vestido y con colores no llamativos, algunos peores, y por eso él los desafía con sus colores.
