Opinión

GINECOLOGÍA ACTUALIZADA

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Condiloma acuminata o cresta de gallo

El  condiloma acuminata o acuminado, conocido también como cresta de gallo o  verrugas venéreas, es ocasionado por los virus de papiloma humano (VPH), los cuales provocan pequeños crecimientos (verrugas) sobre la piel y membranas mucosas. La infección de las regiones anales y genitales con VPH puede ocasionar verrugas (condiloma ano-genital) sobre el pene, vulva, uretra, vagina, cuello del útero y alrededor del ano (perianal).

Han sido clasificados más de 60 tipos diferentes de VPH. Los tipos más severos se asocian con abultamiento y aspereza, y las verrugas genitales son fácilmente visibles, especialmente en mujeres. Los otros tipos se asocian con verrugas planas. Hay otros tipos más importantes que se asocian con cambios pre-malignos y malignos en el cuello del útero (manchas anormales en el Papanicolau). La presencia conjunta de VPH y el virus de herpes predispone al cáncer cervical.

Las lesiones sobre los genitales externos se reconocen fácilmente (verrugas en coliflor). En el pene, las verrugas genitales tienden a ser más pequeñas que sobre los genitales femeninos o que las perianales en ambos sexos. Los condilomas crecen mejor en el área genital húmeda. Son ásperos, coloreados y duros, apareciendo solos o en racimos. Si no se tratan, las verrugas alrededor del ano y de la vulva pueden agrandarse rápidamente, tomando un aspecto de coliflor ya que el mantener el área infectada seca puede ser un problema, y las verrugas se asientan frecuentemente en las áreas húmedas.

En las mujeres el VPH puede invadir la vagina y el cuello del útero. Estas verrugas son planas y no son fácilmente visibles sin procedimientos especiales. Como el VPH puede ser el principio de un cambio precanceroso en el cuello del útero (displasia cervical), es importante que se diagnostique y trate. Para detectar el VPH es importante hacer la prueba de Papanicolau regularmente, que debe ser por lo menos cada 6 meses en las mujeres que, ellas o sus parejas, tengan una historia de verrugas genitales.

La infección por VPH es muy frecuente, aunque la mayoría los casos son asintomáticos, es decir, las personas afectadas no tienen síntomas. Entre los factores de riesgo de las verrugas genitales se incluyen las parejas sexuales múltiples y el inicio temprano de la actividad sexual. En niños, aunque el virus puede transmitirse no sexualmente, la presencia de condiloma acuminata debería despertar sospechas de abuso sexual.

Los principales síntomas son la aparición de tumores sobre los genitales de aspecto verrugoso que han crecido, lesiones superficiales de aspecto coloreado que han aumentado, lesiones genitales, úlceras genitales, verrugas anales, crecimientos anormales alrededor del ano o zona genital femenina con forma de coliflor, aumento de humedad en el área de los crecimientos, aumento de la descarga vaginal, sangrado vaginal anormal (no asociado con el periodo menstrual) después del acto sexual y picor del pene, escroto, área anal, o vulva.

Los tratamientos tópicos para erradicar las lesiones incluyen ácido tricloroacético, podofilino y nitrógeno líquido. Los tratamientos quirúrgicos incluyen: crioterapia, electrocauterización, terapia con láser y escisión quirúrgica. Las parejas con relaciones sexuales con una persona enferma también necesitan ser examinadas por un médico y las verrugas deben ser tratadas si aparecen. Debería practicarse la abstinencia o usarse preservativos hasta la completa desaparición de la enfermedad. Se debe hacer un control a las pocas semanas de terminar el tratamiento.

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