CHICAGO.- La gran mayoría de los jugadores de los Mets de Nueva York estará participando en su primera Serie Mundial, pero para algunos de ellos, estos éxitos colectivos en octubre son más inesperados que otros.
Por ejemplo, en julio de este año, Yoenis Céspedes militaba en un equipo de los Tigres que iba en descenso en las posiciones con cada partido. Pero después de su traslado de Detroit a Nueva York, el cubano ayudó a los Metropolitanos a despegar en el Este de la Liga Nacional y finalmente coronarse campeones del Viejo Circuito.
“Estoy muy contento de haber tenido la oportunidad de ser cambiado a este equipo y poder llegar a la Serie Mundial”, dijo Céspedes el miércoles, luego de que los Mets completaran una barrida de los Cachorros en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional.
Céspedes salió del Juego 4 del miércoles en el segundo inning, debido a unos dolores en el hombro izquierdo. Asegura el toletero que va a estar bien dentro de dos o tres días, versión corroborada por el manager de Nueva York, Terry Collins.
Al fin y al cabo, Céspedes fue figura clave en la victoria de los Mets tanto sobre los Dodgers en la primera ronda de los playoffs como en esta serie frente a Chicago, conectando par de jonrones y empujando siete vueltas.
Wilmer Flores una figura cuyo futuro en los Mets del 2015 llegó a dudarse al máximo. El venezolano no sólo derramó lágrimas el 29 de julio en pleno terreno cuando pensaba que había sido cambiado a los Cerveceros, sino también empezó esta postemporada en la banca. Pero una pierna fractura del paracorto panameño Rubén Tejada hizo que Flores volviera a ser titular en el campo corto.
Pese a las dudas sobre su defensa en las paradas cortas, Flores se vio bien estable en dicha posición durante las primeras dos rondas de los playoffs y ahora se proclama campeón de la Liga Nacional.
“Increíble. Sueñas con esto, viéndolo por televisión…no hay mejor sentimiento que esto, de verdad”, dijo Flores, quien hizo una atrapada clave en territorio foul para ponerle fin a una amenaza de los Cachorros en el cuarto inning del partido del miércoles.
El caso de Jeurys Familia quizás sea la más llamativa entre los jugadores de los Mets. El derecho dominicano empezó el 2015 proyectado para ser el preparador del cerrador. Pero debido a las suspensiones por dopaje de su compatriota dominicano Jenrry Mejía y la falta de eficacia de Bobby Parnell, Familia se apoderó del puesto de taponero y salvó 43 juegos con efectividad de 1.85 durante la campaña regular.
Sin embargo, Familia guardó lo mejor para la postemporada, en la que no ha permitido carrera alguna en 9.2 innings.
“Nunca me esperaba estar en un momento como éste”, dijo Familia.
