La Conferencia del Episcopado Dominicano (CED) exhortó a la Junta Central Electoral (JCE) a disipar toda clase de dudas sobre las votaciones del pasado 15 de mayo, a base de integridad, transparencia, eficiencia, eficacia y responsabilidad.

En un comunicado dado a conocer ayer, los obispos del país manifiestan su preocupación por los acontecimientos ocurridos antes y después de las elecciones, en especial con lo referente al retraso del proceso de tabulación de los votos emitidos.

A la vez, felicitaron al pueblo dominicano por la forma pacífica y por el civismo mostrado al acudir a a los colegios electorales a depositar su voto por los candidatos de su preferencia, y por su participación cívica y democrática.

Ante esa demostración del pueblo, la alta jerarquía católica exhortó a los partidos políticos a observar esa actitud del pueblo como una toma de conciencia de su responsabilidad ante la democracia.

El documento fue emitido por los obispos previo a la JCE dar a conocer el boletín número 12, en el que anuncia la reelección del presidente Danilo Medina y de la vicepresidenta Margarita Cedeño de Fernández, y de los senadores y diputados que resultaron electos en 21 provincias donde ha contabilizado la totalidad de votos emitidos.

Los obispos criticaron que “han pasado varios días, y todavía la JCE no ha podido concluir el proceso que permita expresar ante la opinión pública quiénes han resultado ser oficialmente los ganadores que conformarán el próximo Congreso Nacional y las diversas salas capitulares de nuestros ayuntamientos”.

Recordaron que es deber de la JCE disipar toda clase de dudas a base de integridad, transparencia, eficiencia, eficacia y responsabilidad.

Pidieron que el conteo y publicación de votos no deje lugar alguno a la más mínima duda sobre la limpieza del proceso electoral en esta fase final decisiva.

Sin embargo, señalan que habiendo utilizado medios electrónicos sofisticados, es explicable que se hayan producido fallas y deficiencias que exhortaron sean examinadas con objetividad.

Sugieren que pasadas las elecciones la JCE no debe ser obstaculizada ni presionada, por lo cual exhortan a que el resultado sea aceptado con grandeza de ánimo, sin excesos provocadores de los triunfadores y sin acusaciones falsas por los perdedores.

“Pasadas las elecciones hay que respetar la decisión de la mayoría y acoger con beneplácito la decisión del pueblo expresada en las urnas”. Los reclamos y las acusaciones hay que fundamentarlos, probarlos y cursarlos por los canales institucionales. De igual manera el tribunal competente está obligado examinarlos y a dar razón en justicia al que la tenga”, abogó la Conferencia del Episcopado Dominicano.

El máximo órgano de dirección de la Iglesia católica en el país exhortó a que “Propiciemos que la Junta Central Electoral y las municipales puedan concluir su trabajo. Para ello vemos conveniente que los distintos actores políticos se pongan de acuerdo y permitan que estas instituciones encargadas de la administración de las elecciones puedan concluir su labor tal como lo establecen las leyes”.

Al mismo tiempo, pidieron a los partidos políticos y a los ciudadanos que en nombre de la paz reconozcan que la situación del país reclama un fin del proceso electoral que sea ejemplar, por lo cual exhortaron a que la fase final de las elecciones sea modelo de cordura, civismo y respeto mutuo, “sintiéndonos todos responsables de construir una patria basada en valores permanentes de verdad, amor, de esperanza y de paz”.

EL DATO

Firmantes
El documento está firmado por los obispos Gregorio Nicanor Peña, presidente de la CED; José Dolores Grullón Estrella, de San Juan de la Maguana y vicepresidente de la CED; Francisco Ozoria Acosta, de San Pedro de Macorís, y Fausto Ramón Mejía Vallejo, de San Francisco de Macorís.