SANTIAGO. El semanario católico Camino definió como “dañina” la posición de los legisladores nacionales respecto a la práctica de recibir fondos del Estado, que alegan destinan cada mes a obras sociales. Al tiempo de felicitar al presidente de la Cámara de Diputados, Abel Martínez, quien decidió suspender el llamado “cofrecito”, el vocero escrito del Arzobispado de aquí pide a los senadores adoptar similar posición.
En el editorial titulado “Una práctica dañina”, que aparecerá en su edición de este domingo, Camino respalda lo dispuesto por Martínez, en el sentido de que los millones de pesos provenientes del llamado Fondo de Gestión Social, sea destinado a centros de salud pública.
Camino secunda la decisión tomada en la Cámara baja “porque el mismo desnaturaliza la función de un legislador dando un golpe mortal a la institucionalidad”.
“Además, es la expresión más elocuente del fracaso del Estado para dar respuesta a las necesidades básicas de la población”, precisa el semanario católico y se pregunta para qué existen los diferentes ministerios si conjuntamente se han creado otros mecanismos paralelos de asistencia social.
Para Camino, ahora le toca a los senadores “ponerse a tono con los anhelos de la ciudadanía, que les exige destruir el “barrilito” y comprender por siempre que su misión es otra” y que los millones de pesos que reciben cada mes, fuera de su salario, están al margen de la ley.
“Tienen que entender que están ahí para legislar y fiscalizar. Salirse de esa función, para desarrollar programas sociales revestidos de caridad, le hace daño a su imagen, porque queda al descubierto que lo que buscan es aumentar el clientelismo para perpetuarse en sus cargos”, aduce.
