Las autoridades desconocen si el sicario Pedro Alejandro Castillo Paniagua (Quirinito) se encuentra en el extranjero o escondido en algún lugar del país, por lo que los organismos de seguridad mantienen de manera activa su búsqueda a nivel nacional e internacional.

E incluso, las autoridades piensan que el intento de salida del país con destino a Guatemala de su esposa Jennifer Esthefani Domínguez, pudo haber sido parte de una trama para hacer creer a las autoridades que su marido se encuentra en esa nación.

“No se puede descartar nada y por eso la búsqueda se mantiene a nivel nacional e internacional”, declaró a El Nacional una fuente de los organismos de seguridad del Estado encargados de la búsqueda de Quirinito.

Domínguez, esposa de Quirinito, fue detenida el 13 de este mes en el Aeropuerto Internacional de Las Américas cuando intentaba salir con destino a Guatemala sin informárselo a las autoridades, en violación a un acuerdo que había hecho con los investigadores de informales antes de hacer cualquier viaje.

Para los organismos encargados de la persecución y apresamiento de Quirinito, el intento de salida del país de su esposa podría ser parte de una “jugada” para confundir a las autoridades.

Tras ser retenida, fue conducida a la Procuraduría General de la República, en donde se la interrogó, pero se negó a revelar el paradero de su esposo.

Sin embargo, admitió ante el procurador adjunto Bolívar Sánchez haber incumplido el acuerdo al que había llegado con el Ministerio Público, al intentar abandonar el país sin informarles.
“Es cierto que yo iba a salir del país, hubo un acuerdo que yo arribé con la Procuraduría y, al incumplirlo, me citaron, me requirieron al respecto, yo vine, hice acto de presencia y ya está todo subsanado”, dijo en esa ocasión al salir del interrogatorio.

No obstante, se negó a ofrecer declaraciones sobre las afirmaciones hechas por la Procuraduría en el sentido de que “Quirinito” está vivo y no falleció a causa de un cáncer en la lengua como dice el acta de defunción.

La fuente que suministró la información dijo que hace poco se hizo un operativo en Baní, en búsqueda de Quirinito ante informaciones que daban cuenta que estaba en esa ciudad, pero resultaron erróneas.

El narcotraficante y sicario, condenado a 20 años de prisión, logró junto a sus abogados diseñar un plan de fuga haciendo creer a las autoridades que había muerto, producto de un cáncer en la boca, lo que comprobó era falso.