La administración del Centro Médico Dominicano prohibió el acceso a los periodistas que buscan información sobre el estado de salud del recluso César Sánchez, implicado en el caso Odebrecht y quien fue hospitalizado ayer, tras presentar un sangrado en la orina.
Un miembro de la seguridad del centro informó que la administración instruyó para que no se permitiera el acceso a la prensa a la sala donde está ingresado el exadministrador de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE).
Sánchez cumple prisión preventiva de tres meses en la cárcel de Najayo, por supuestamente, haber recibido sobornos para facilitar contratos entre el Estado dominicano y la empresa brasileña Odebrecht.
“Tenemos instrucciones de la administración de no permitir la entrada de periodistas, solo estoy cumpliendo lo que me ordenaron”, dijo el vigilante a reporteros de El Nacional.
Junto a Sánchez fueron sentenciados a cumplir medida de coerción otros nueve implicados en el escándalo, que involucró el pago en sobornos de 72 millones de dólares, según las autoridades locales.
En el grupo figuran tres legisladores, contra quienes se dictó impedimento de salida y el pago de una multa equivalente a cinco millones de pesos.
Ellos son los senadores oficialistas Julio César Valentín (Santiago) y Tommy Galán (San Cristóbal), así como el diputado opositor, Alfredo Pacheco.
