LOS ANGELES, EE.UU, Mlb.com.- Dentro de la competencia por procurar los servicios de Shohei Ohtani, los Dodgers fueron uno de los equipos que se reunieron en persona con el estelar japonés el lunes, informa Ken Rosenthal de MLB Network.
Los Angeles es el único “finalista” de la lucha que puede ofrecer la oportunidad de jugar en un equipo que acaba de participar en la Serie Mundial. Por supuesto, nadie sabe si eso será algo positivo o no para Ohtani, ya que con la oportunidad de ganar viene la presión de triunfar. Lo que está claro es la meta de Ohtani de ser la combinación más impactante de lanzador/bateador en la era modera de Grandes Ligas-el Babe Ruth de la edad digital.
Los Dodgers no han dicho nada públicamente acerca de Ohtani, pero siguen como uno de los siete equipos que el joven ve como posibilidades para firmar. Los azules cuentan con más que el hecho de venir de ganar el banderín de la Liga Nacional.
Los Angeles presume la mayor comunidad japonesa en el área continental de los Estados Unidos. Los Dodgers tienen un amplio historial de éxitos con lanzadores japoneses-Hideo Nomo, Kaz Ishii, Takashi Saito, Hiroki Kuroda, Kenta Maeda y Yu Darvish. Su coach de pitcheo, Rick Honeycutt, es conocido como un instructor que ha hecho buena liga con los serpentineros japoneses. Dodger Stadium es un estadio favorable para los pitchers, y la mejor arma de Ohtani-pese a su habilidad de conectar jonrones de 500 pies-es su recta que alcanza las 100 millas por hora.
Los Dodgers cuentan con un especialista japonés en masajes dentro del cuerpo médico, Yosuke Nakajima; un director de viajes, Scott Akasaki, que habla japonés; un gerente de relaciones públicas, Daisuke Sugiura, que también habla el idioma; y hasta un manager nacido en Okinawa de madre japonesa, Dave Roberts.
Y los Dodgers, que normalmente ocultan sus intenciones, se expresaron públicamente en algunas ocasiones durante la temporada del 2017, hasta el punto de que el comentarista de Los Angeles, Orel Hershiser, abandonó la cabina de transmisiones por un tiempo para acompañar al presidente de operaciones de béisbol del equipo, Andrew Friedman, en Japón para observar a Ohtani.
