¿Por qué al programa Barrio Seguro se le llama Plan de Seguridad Democrática?
Primero hay que precisar que este programa Barrio Seguro, es tan solo una parte de Plan Nacional de Seguridad Democrática. Este programa, con su puesta en vigor como plan piloto en el barrio Guachupita -se ha extendido hoy a otros muchos- generó muchas expectativas y críticas pero también satisfacciones. Barrio Seguro es, por así decirlo, la parte más visible, palpable y medible de todo el Plan.
Cuando hablamos del Plan de Seguridad Democrática nos referimos a las políticas públicas de seguridad de un Estado, que debe integrar a todas sus instituciones, como parte activa crea sinergia con los demás sectores de la sociedad, a fin de garantizar los derechos fundamentales de las personas.
Cuando se habla de estos derechos, se debe resaltar el derecho a participar libremente, el desarrollo humano integral y sostenible, dando un trato digno e igualitario a todos los habitantes de un país, sin importar ideologías, ni características sociales.
Estos derechos se deben garantizar a través del fortalecimiento de las instituciones, especialmente los órganos de defensa y seguridad con el consenso y la participación interactiva de los habitantes.
Las personas que tienen la tendencia a tratar de apostar al fracaso de toda iniciativa gubernamental y mayormente si es en el área de las políticas públicas de seguridad, comenzaron a criticarlo sin apenas conocer el plan y tampoco sin darle tiempo a que diera sus frutos.
El problema estriba en que estamos acostumbrados al inmediatismo, a las soluciones tipo comida rápida para todo, y no se quiere esperar a ver los resultados de la aplicación de determinado programa o iniciativa en el área que se refiera.
Al Plan Nacional de Seguridad Democrática, se le ha puesto esta última palabra como etiqueta, debido a que concibe, diseña y aplica políticas públicas de seguridad, en el marco de la democracia como sistema de gobierno.
Como se trata de un plan democrático, llamado a fortalecer a la democracia dando participación e involucramiento de todas las personas y para ser aplicado en el marco de un estado de derecho y dentro del orden constitucional, se desprende de manera primaria que es un programa respetuoso de los derechos humanos y de las libertades públicas consagradas en la Constitución y contenidas en los tratados internacionales. Por eso es democrático.
En resumen, la seguridad democrática debe ser un proyecto político y social que se aplique correctamente y acorde a los cambios que requiere y exige la sociedad dominicana para acabar con el narcotráfico, la criminalidad, la inmoralidad y la violencia en todas sus manifestaciones, además, la pobreza, el analfabetismo, la injusticia, la corrupción, la contaminación, el atraso, la discriminación, el individualismo, el terrorismo, el autoritarismo, la anomia, entre otros.
