A propósito de la demanda de amparo
del general Percival (I)
El respeto al derecho ajeno es la paz
Benito Juárez
Nuestra herencia cultural de sumisión, servilismo y tolerancia, en cuanto a violaciones y acciones contrarias al estado de derechos, y la viabilización de una democracia real, sigue arraigada en las entrañas de nuestra sociedad y sobre todo impulsada y mantenida por los gobiernos. En estos momentos más que nunca, se presenta la indiferencia ante los abusos de poder y represión a las libertades, contrariando los principios trinitarios y mancillando el sacrificio y dogma de nuestros héroes y patriotas que han arriesgado y dado su vida por amor a la patria, sentimiento que se sigue perdiendo.
A propósito de los retiros irregulares e inconstitucionales de militares y policías, realizado el pasado mes de agosto, situaciones éstas que lamentablemente se han hecho costumbres y en lo que se destaca el caso del Gereral Rafael Percival Peña, debo y se puede decir que: El
Gobierno se ha colocado por encima de la ley, para ello cuenta con la complicidad, sumisión y servilismo de los demás poderes del Estado y el resto de la sociedad.
Es propicia la ocasión para advertir al Gobierno y demás autoridades que dirigen, que el agua esta a punto de recibir la ultima gota que derrame el vaso, pues el juego que se quiere seguir de irrespeto a la institucionalidad cada día más acomoda el escenario, para dar paso a una medición de fuerza entre el pueblo, liderado por hombres y mujeres probos y los corruptos sin humanidad que nos gobiernan.
Repito, nadie debe estar por encima de la ley, ni el Papa, ni el más rico, ni el Presidente, ni los empresarios, ni los generales, ni los padres de familias, ni los hijos de machepa, ni los capos, ni Vincho y Vinisito, que cobran y sub contratan medios para desinformar, dando cabida a la anomia en que se vive. A todos ellos les digo se están jugando con fuego y están a punto de quemarse.
Esperamos que aunque sea de manera excepcional, la justicia dominicana o por lo menos en el caso de Percival el juez apoderado asuma su rol de hacer justicia, imparcial y ciega, para sentar un precedente y guía al respeto de derechos y libertades que tanta falta nos hace.
Ojala que tanto oscurantismo (Un Estado sin justicia, anómico, pésima educación, sin salud, sin seguridad ciudadana ni jurídica, sin alimentación ni impulso a la producción, sin oportunidad de trabajo, sin oportunidad de viviendas, sin soberanía, sin ninguna política pública a favor del pueblo, de la gran mayoría más desposeída, sin agua potable ni electricidad, sin transporte público, sin ningún derecho en cuanto a necesidades básicas garantizado) sea por que ya realmente pronto vaya a amanecer y tengamos los derechos garantizados, especialmente las necesidades básicas. Demandamos se cumpla lo que establece la Ley No. 437-06, que establece el Recurso de Amparo en cuanto al caso del General Percival continuará
