El ambiente en el Palacio de Bellas Artes era de una masiva presencia femenina, clase media acomodada y acompañada, en los casos más consecuentes, de la presencia masculina, a pesar de las advertencias de la protagonista del montaje a que a lo que se acudía no sería un paredón feminista para enjuiciarles, lo que se cumplió, pero solo en parte.
La Isabella Santo Domingo tuvo dominio de la escena desde que salió y dijo buenas noches Santo Domingo .!Ay, qué situación me parece que me estoy saludando a mí misma!.
Desde ese punto, la artista, modelo y, sobre todo escritora del bett seller Los caballeros las prefieren brutas, toma el control de las acciones logrando carcajadas a cada tanto de tramo, una tras otra, haciendo burla de lo que para muchas mujeres es canto de tragedia y vivir sin sentido.
Así desfilas los recuerdos de la infancia, la ilógica de los juguetitos para niñas, la bufónicas referencias a la infidelidad masculina y femenina, las alusiones a la importancia del tamaño de los poderes del hombre, la ridiculización de los centímetros de menos en el falo imaginado grande (Made in Africa o Made in Samaná), desechando la producción en serie y generalmente defectuosa de los vibradores chinos.
Se pasa divertida el stand up comedy como se define anglosajonamente a lo que es en realidad un monólogo, caracterizado por una buena capacidad de improvisar, de enganchar con situaciones que se presentan en el momento (como el apagón con efecto de sonido que dejó a oscuras la sala y el oportuno Bienvenida a Santo Domingo, de parte de uno de los asistentes y que fue saludado por un aplauso firme por la concurrencia femenina, dado el acierto y la oportunidad de la expresión. El público no teatral que asistió anoche disfruto en grande, pero el discurso de conflicto masculino-femenino, no resulta nuevo y en oportunidades coincidía con las frescas comedias de Las Máscaras o las iniciativas de Niurka Mota, desde la Sala Ravelo. En fin, se pasa muy bien, pero el tema es solo uno. Por ello, en ocasiones suena como ya escuchado.
Buena logística
Fue notable la logística y la organizacíón montada por Proyes, una empresa nueva que se esmeró tanto en los detalles como en una adecuada comercialización del montaje. El programa de mano tenía escasa información teatral, pero afortunadamente buen respaldo empresarial, lo que siempre es saludable como apoyo al arte.
Un Apunte
No es cierto
La Isabella se equivoca en algunos puntos de su discurso. No es cierto que las mujeres se hagan las brutas para conquistar o retener un hombre. Un hombre al que hay que fingirle inferioridad intelectual no merece ninguna mujer a su lado. La novedad de su montaje fue su presencia agradable física, su versatilidad indudable como talento histriónico, pero el discurso fue errático y a ratos repetitivamente conocido.