ANAHEIM – Tomó más de tres semanas, una salida decidida de Johnny Cueto y un día épico de Brandon Belt, pero los Gigantes finalmente ganaron su primera serie esta temporada.
El histórico turno al bate de 21 lanzamientos de Belt en la primera entrada del domingo fue el tema de conversación, pero su cuadrangular en la quinta entrada ayudó a impulsar una victoria de 4-2 sobre los Angelinos.
Cueto contribuyó con su parte justa también, manteniendo a los Angelinos sin carreras en dos hits después de llevar un juego sin hits en la sexta entrada. Mejoró su efectividad a 0.35 después de cuatro aperturas.
El promedio de carreras limpias de Cueto de 0.35 es el más bajo para un lanzador de los Gigantes después de cuatro aperturas desde que Ray Sadecki tuvo una marca de 0.25 en 1968. Cueto ha permitido una carrera en 26 entradas en lo que va de la temporada, lanzando salidas sin carreras contra Dodgers, Diamantinas y ahora los Angelinos.
“Es genial obtener una serie”, dijo el mánager de los Gigantes, Bruce Bochy. “Odias esperar todo este tiempo para conseguir una, pero en el camino contra un club que realmente ha estado jugando bien este año, Johnny sacó la cara por nosotros. Qué gran esfuerzo nos dio y nos aferramos”.
Los Gigantes ganaron dos de los tres juegos en Anaheim, en una revancha de la emocionante Serie Mundial de 2002 ganada por los Angelinos.
Cueto, quien se perdió un comienzo reciente con un esguince de tobillo, se sintió incómodo, incluso recibió una visita del entrenador en un momento dado. No cedió un hit base hasta que Ian Kinsler conectó sencillo para comenzar la sexta entrada.
Cerró el sexto al llenar las bases, pero logrando que Luis Valbuena bateara para una doble matanza 3-6-1 para poner fin a la amenaza. Cueto hizo una puño y lanzó un golpe al aire después de sacar el out en la primera base, que terminó siendo el final de su salida.
