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La gasolina verde; el  nuevo invento

<P>La gasolina verde; el  nuevo invento</P>

Esta semana fue divulgado un estudio que demuestra la posibilidad de producir gasolina y otros combustibles a partir de aire y agua

Se remueve el CO2 de la atmósfera y se combina con hidrógeno separado del vapor de agua. Se convierte luego en un combustible que puede introducirse directamente en el tanque de gasolina.

Es como la combustión al revés y, en esencia, es lo que les da energía a las plantas: entran CO2 y agua, salen moléculas de azúcar ricas en energía.

Pero en términos energéticos nada llega gratis.

Así como las plantas necesitan de la luz solar para hacer sus maravillas, también Air Fuel Synthesis, la compañía que apareció descrita en el periódico británico The Independent, necesita energía eléctrica para lograr las suyas.

Como con cualquier método nuevo para la producción de combustibles o almacenamiento de energía, lo que importa en últimas son las cifras: la eficiencia es la clave.

El nivel al cual esta técnica puede cumplir su promesa de reducir el CO2 y producir una fuente de combustible sostenible depende crucialmente del balance de energía que necesite y de la energía que almacene.

Experimento de pruebaPero primero lo primero: introducir el CO2 en una molécula llena de energía no es una nueva idea.

Por ejemplo, un trabajo realizado en la Universidad de Princeton, en EE.UU., y publicado en 1994, con el objetivo de producir metanol a partir de CO2, fue pulido recientemente y convertido en una compañía llamada Liquid Light, que busca hacer exactamente lo mismo.

En Islandia, la compañía Carbon Recycling International abrió una planta a final de 2011 para recoger CO2 residual de una central eléctrica, con la capacidad para producir cinco millones de litros de metanol al año.

“Lo único que estamos tratando de demostrar es que acá en Reino Unido se puede hacer gasolina a partir del aire.”

Air Fuel Synthesis construyó sobre estos métodos al convertir el metanol en algo más parecido a la gasolina, usando procesos bien arraigados en la industria petrolera.

La compañía, hasta ahora, ha producido cinco litros de su gasolina en un experimento de prueba de dos años en el que invirtieron US$1,6 millones.

Peter Harrison, el director de la compañía, le dijo a la BBC que el experimento de prueba no se enfocó en la eficiencia, sino que buscó demostrar la base del proyecto.

“Lo único que estamos tratando de demostrar es que acá en Reino Unido se puede hacer gasolina a partir del aire”, dijo.

“(Estos procesos) son todos capaces de funcionar a escala industrial, y nosotros lo hemos reducido a una escala de contenedor. Hay mucho trabajo por hacer para desarrollar las cadenas de distribución y para reducir los costos”.

“Tenemos un diseño para una unidad (que produzca) una tonelada al día, y esperamos estar produciendo para 2015”.

“Jugador minoritario”El primer mercado al que aspiran llegar es “hacer más verde la industria de los deportes a motor”, al ofrecer su gasolina pura a los equipos de carreras.

Pero en un plano más general, la idea de hacer gasolina a partir del aire se suma a una legión de otras ideas que están tratando de solucionar el problema de almacenar la energía producida por fuentes renovables.

Como el enfoque de “aire líquido”, clic del que se informó recientemente, Air Fuel Synthesis quiere usar energía renovable a la que puedan acceder cuando no haya una demanda de consumidores por ella.

“Será un jugador minoritario en términos de tratar de cumplir con las demandas globales de combustibles. Uno muy, muy pequeño.”

Mark Carpenter, investigador del Grupo de Seguridad Química, Combustibles y Medio Ambiente, en la Universidad británica Cranfield, dice que los hidrocarburos son “una muy buena manera de almacenar energía”, pero agrega que la única forma de hacerlos sostenibles es vinculando el proceso a la energía renovable.

“Un factor decisivo es si pueden conseguir suficiente electricidad renovable y a bajo costo”, le dijo a la BBC. “Podría ser una manera muy limpia y verde de producir hidrocarburos”.

“Pero será un jugador minoritario en términos de tratar de cumplir con las demandas globales de combustibles. Uno muy, muy pequeño”.

Carpenter añade que le parece “interesante que alguien considere esto como un método”, pero también señala que hay que hacer que la química funcione y alcanzar un grado razonable de eficiencia.

Como ocurre con muchos otros productos energéticos y métodos de almacenamiento, sólo el tiempo y las fuerzas del mercado podrán determinar qué tan lejos puede llegar la idea de producir gasolina a partir del aire.

El Nacional

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