Opinión

La juventud en los partidos

La juventud en los partidos

El transfuguismo político, que no es más que pasar sin tapujos de una parcela política a otra, se ha puesto de moda de tal manera que en la población no causa asombro ese tipo de información. Esto, aunque no se vea en lo inmediato, este tipo de inconducta política le está haciendo serios daños al sistema de partido y a la credibilidad de la dirigencia de esas entidades.

Sin embargo, así como consideramos un antivalor el pasar de un partido a otro por razones oportunistas, no ideológicas, también hay que valorar como positivo el comportamiento de aquellos que se mantienen apegados a principios y compromisos, rechazando ofertas tentadoras.

En este proceso electoral, hay muestras por doquier de uno u otro caso. Pero la última y más resaltante fue la que se dio entre Fello Suberví y su hijo Fellito Suberví.

Al igual que Fellito Suberví, los partidos deben garantizar espacio a los candidatos jóvenes.  El primero pasó del PRD al PRM y luego retornó al PRD; en un período de menos de un año, contrario a su hijo, que aunque aspira a estar en la boleta como candidato a diputado, prefiere echar el pleito dentro de su partido.

Al igual que Fellito Suberví, los partidos deben garantizar espacio a los candidatos jóvenes
La firmeza de este muchacho, a quien no tengo el honor de conocer, y que al igual que otros tantos que militan en diversos partidos se resisten a formar de esta cultura.

De modo que los partidos debieran valorar a los jóvenes dirigentes que se las juegan dentro de la entidad, levantando principios y posiciones. Esos deben ser los candidatos como forma de enviar un mensaje positivo a la sociedad.

En el caso de Fellito es un buen activo del PRM en la circunscripción dos y ojalá que al momento de conformar sus boletas, los demás partidos piensen en el potencial que representa la juventud.

El Nacional

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