Opinión

La mujer en su día

La mujer en su día

El pasado domingo se celebró el Día Internacional de la Mujer, por su participación, en pie de igualdad con el hombre, en la sociedad y en su desarrollo íntegro como persona. En 1977, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) proclamó el 8 de marzo como Día Internacional por los Derechos de la Mujer y la Paz Internacional.

Es mucho lo que se ha escrito sobre los derechos de la mujer, pues a pesar del tiempo transcurrido, todavía hoy quedan muchos temas pendientes para lograr la emancipación de la mujer.

Es ardua la lucha de la mujer dominicana para lograr plenamente sus derechos; todavía existe la discriminación en muchos aspectos, algo que conspira contra la igualdad de género. Pero además está la violencia contra ella, la pobreza que la arropa y las pocas oportunidades de acceso a la cultura en sentido general. Es cierto que en el país hay más mujeres que hombres que estudian en las Universidades, pero uno se pregunta qué sucede cuando se gradúan. Sencillamente, que igual que muchos jóvenes, no encuentran empleos. Y, si los consiguen, siempre están en desventaja salarial con respecto a los varones. Es decir, hay una desigualdad.

Según las Naciones Unidas “la desigualdad causa inestabilidad, lo que hace que se produzcan con más frecuencia fuertes oscilaciones en la economía. Las desigualdades extremas significan que fracciones cada vez mayores de la población están en condiciones de pobreza, por lo que son menos capaces de lidiar con las crisis cuando estas tienen lugar. Las desigualdades económicas extremas conducen inevitablemente a la desigualdad política, cuyo resultado es que los gobiernos tienen menos probabilidades de proporcionar sistemas de protección social que puedan proteger a los más desfavorecidos de las consecuencias de las grandes crisis”.

La violencia contra la mujer dominicana no se ha detenido, lo que es otro factor de gran preocupación. No hay día en que una mujer no sea maltratada o asesinada. Esto indica que los programas de concienciación para educar a los hombres sobre el respeto que deben tener a la mujer, han sido un rotundo fracaso. Las mujeres dominicanas tienen también otras carencias, principalmente en las áreas de la salud, la vivienda y la educación.

El hecho de que haya más mujeres que hombres estudiando en las universidades, no incluye a las mujeres de todo el país.

En los barrios pobres, ni las mujeres ni los hombres tienen siquiera una biblioteca para nutrirse de nuevos conocimientos. En resumen, hay que fortalecer y crear nuevas políticas a favor de la mujer dominicana.

El Nacional

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