Opinión

La vandera sin sueldo

La vandera sin sueldo

Aplique estos consejos el día de lavado y verá cómo sus prendas se verán nuevas por más tiempo:

Lave una vez a la semana… y rote

Cuando se lava un juego de sábanas semanalmente y tiene en uso uno dos o tres juegos distintos, éstas se verán más nuevas por mucho más tiempo.  De hecho, por experiencia de una experta lavandera que conozco -y propietaria de impecables juegos de ropa de cama- unas sábanas buenas, de calidad, le pueden durar de diez a quince años.  Use blanqueador sin cloro en las sábanas de color, guarde el cloro para cuando sea absolutamente necesario, ya que con el paso del tiempo, el cloro va debilitando las fibras de los tejidos.   Una manera más delicada de darle más brillo a sus sábanas blancas es con zumo de limón, agregue un cuarto de taza al ciclo de lavado y lave como siempre en agua tibia.  Si van para la secadora use la posición “tumble” del dial, o mejor todavía, póngalas al sol del medio día para secar.

Use sus máquinas como un verdadero profesional

Resista la tentación de acelerar el proceso de lavado sobrecargando la lavadora y la secadora.  La ropa no se limpiará tan bien y hará que el motor trabaje forzado.  Las sobrecargas en la secadora lo único que consiguen es prolongar el tiempo de secado y ropas llenas de arrugas.  Mejor consiga un carrito con divisiones y clasifíquelas por el peso del tejido, seque sábanas y toallas en diferentes momentos.  Reducirá el tiempo de secado y los tejidos se secarán de manera más pareja.

¿Sábanas ásperas?

A veces al principio, las sábanas impresas se siente como papel de lija, un poco ásperas.  Eso se debe a que la tinta que utilizan cuando las imprimen es muy gruesa y deja una ligera textura en la superficie del tejido.  A medida que las lave, irán suavizando.  De hecho, las sábanas de tejidos más cerrados, se pondrán más suaves con cada lavada.  Séquelas en la posición “tumble” del dial a temperatura media y sáquelas tan pronto pueda de la secadora para reducir las arrugas.

 

Las toallas

Al lavar las toallas, hágalo en agua tibia y por colores parecidos.  Asegúrese de lavar las toallas nuevas solas antes de usarlas, para quitar cualquier exceso de tinta de las que tienen colores brillantes y profundos.  Un consejo aparte: no sea tacaño con las toallas, no siempre pierden el color, pero botan una cantidad de pelusa que lo dejarán preguntándose cómo es que no se quedan calvas, las pelusas vuelan a los lugares más insólitos del baño, y en menos de dos días de uso, el piso parecerá que que le crece una gramita muy Pop Art.

Suavizante de ropa

No use suavizantes de ropa o toallitas para el secado en sus toallas.  El suavizante cubre las fibras de toalla con silicones, y realmente las hará menos absorbentes.  Para refrescar sus toallas y mantenerlas oliendo rico, agregue media taza de bicarbonato de soda al ciclo de lavado.  Olerán súper frescas.

Yo seco las toallas afuera

Si tiene la dicha de poder secar la ropa en un tendedero, bajo los gloriosos rayos del sol, sacuda las toallas antes de colgarlas y de nuevo antes de doblarlas.  Las fibras de la tela de toalla se levantarán y volverán a ser suaves y absorbentes.  Si las tiene que colgar adentro, métalas en la secadora cinco o diez minutos y luego cuélguelas.  Ahora tiene su propio atajo de la lavadora al clóset de la ropa blanca.

El Nacional

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