Montecristi. El presidente del Consejo de Coordinación de la Zona Especial de Desarrollo Fronterizo llamó a las nuevas empresas que han sido certificadas para operar con las ventajas de exención fiscal establecidas en la ley 28.01 a que respeten lo establecido en el Código Laboral referente a la proporción de la mano de obra criolla y extranjera.

Miguel Bejarán hizo el planteamiento al indicar que las empresas que se están acogiendo a esa ley, con el interés de pagar menos salarios, están contratando una cantidad de trabajadores haitianos superior a los dominicanos.

Bejarán habló ayer en el acto de entregó de los certificados de aprobación a 14 nuevas empresas fronterizas, acreditándolas para operar bajo el régimen de exención fiscal que otorga la ley 28-01, con lo cual se crearán mil 611 empleos directos y más de 6 mil 400 indirectos, en esa empobrecida región.

Exhortó a los nuevos empresarios de la zona de la frontera a acatar el mandato del Código Laboral, en lo referente a la proporción de la mano de obra criolla y extranjera, ya que muchas de las industrias que ya están establecidas, funcionando con la ayuda de los incentivos que aporta la ley 28-01, reflejan una nómina con una contratación superior de trabajadores de origen haitiano.

“Hay un aspecto que no contempla la ley, pero que el Consejo acordó asumir una posición responsable en lo relativo a la proporción de la mano criolla y extranjera. Hay empresas que por pagar menos ponen a trabajar una cantidad de mano de obra foránea que no se corresponde con lo que establece el Código Laboral; no es cierto que los dominicanos no quieren trabajar, lo que hay es que ofrecer mejores condiciones de trabajo, con lo que cumplirían con el espíritu del reglamento”, dijo.

El también titular de la dirección general de Desarrollo Fronterizo solicitó a los miembros del Consejo trabajar para lograr que la ley 28-01 contemple un período de operación de las empresas de más de 20 años, como hasta ahora está establecido, ya que el funcionario entiende que las condiciones en las que éstas industrias deben operar las ponen en gran desventaja con las de cualquier otra zona del país.

“Luego de felicitar a los empresarios aquí presentes por su arrojo y valentía, ya que atreverse a invertir en una zona tan inhóspita merece el reconocimiento de toda la sociedad, les exhorto a aprovechar los incentivos que les otorga esta ley para con su producción y la creación de empleos transformar las condiciones existentes en esta parte de la nación”, dijo.