Cuba sorprendió al mundo del béisbol profesional al dejar en el camino a República Dominicana en una de las patas de la semifinal del primer Clásico Mundial (2006) en partido celebrado en Petco Park, hogar de los Padres de San Diego.
La victoria de Cuba 3-1 con gran labor monticular del diestro Pedro Luis Lazo permitió a los antillanos disputar la final ante Japón, choque en el que sucumbieron 6-10 para quedarse con el segundo lugar en el certamen.
La nación ha sido desangrada luego de cada participación, pero eso no ha sido óbice para que sigan realizando un buen trabajo, aunque jamás han regresado a la fase final del evento.
En el primer Clásico Cuba jugó la primera ronda como parte del grupo C en San Juan, Puerto Rico y avanzó con registro de 2-1 al disponer de Panamá y Holanda con marcadores de 8-6 y 11-2, respectivamente y caer ante Puerto Rico 2-12.
En la segunda ronda, los cubanos dieron el paso adelante en un endemoniado grupo en el que enfrentaron a Venezuela, República Dominicana y Puerto Rico, sus hermanos del Caribe.
La tropa de Higinio Vélez venció a los sudamericanos 7-2 y se impuso 4-3 a los boricuas y continuaron adelante aunque perdió 3-7 ens u juego directo contra los dominicanos.
El formato provocó un encuentro semifinal entre caribeños y otro entre asiáticos (Japón vs Corea del Sur). Muchos piensan que debió ser una semifinal cruzada.
Los jugadores que estuvieron en la escuadra del 2006 que posteriormente se dieron a conocer son: Yulieski Gurriel, quien para entonces tenía con 22 años, Alexei Ramírez, de 25 y Yunieski Maya, también de 25.
Cuba regresó al Clásico en la segunda edición (2009) y en la primera ronda estuvo en el Grupo B junto a Sudáfrica, Australia y México en una contienda que tuvo como sede a Ciudad México.
Otra vez comandada por el legendario Vélez, la mayor de las Ántillas, barrió con sus oponentes: Australia (5-4), México (16-4) y Sudáfrica (8-1) para avanzar a San Diego, donde enfrentaría a Japón y México.
Los bates cubanos fueron dominados por el pitcheo nipón que le blanqueó en dos ocasiones 6-0 y 5-0 para eliminarlos de la justa. Los cubanos vencieron 7-4 a los mexicanos.
En el contingente del 2009 repitió Gurriel y otros que luego llegaron a las Mayores fueron: Leonys Martín, 21 años en ese momento; Yoénis Céspedes (24), Aroldis Chapman (22), Yunieski Maya, de 28, repitió. Alfredo Despaigne, de 22 años, es un monstruo que todavía está dando palos en la isla y en Japón, pero no ha dado el salto al béisbol de Estados Unidos.
Para el 2013, la selección cubana cambió de manos y fue dirigida por la antigua estrella Víctor Mesa. Esa vez el conjunto fue enviado a jugar a oriente en la primera ronda junto a Brasil, China y Japón.
Los isleños azotaron el grupo con victorias 5-2 (Brasil), 12-0 (China) y 6-3 (Japón) en el Fukuoka Dome.
En la segunda ronda en el Tokio Dome, Cuba aplastó 14-0 a China Taipei, pero dos derrotas ante Holanda 6-2 y 6-7 le enviaron de regreso a la casa.
En ese certamen participó por tercera vez Yulieski Gurriel, quien este año se hubiera unido al reducido club de los que han participado en las cuatro versiones de no haber firmado con el béisbol de estadounidense.
Otros que vistieron la franela cubana y ya no están son: José Dariel Abreu, de 26 años en el momento; Alfredo Despaigne (26), Rusney Castillo (26), Odrisamer Despaigne (26) y Yasmany Tomas (23).
Cuba va a su cuarta presentación en el Clásico y los organizadores lo ubicaron en el grupo que jugará la primera ronda en Japón, el Tokio Dome, escenario muy conocido por la representación del país de los Castro.
A pesar de las deserciones se espera que los cubanos puedan pasar a la segunda ronda, ahora dirigidos por Carlos Martí, mánager que ganó el torneo nacional con Granma.
Estarán en el conjunto el lanzador Lázaro Blanco, el veteranísmo Frederich Cepeda, Alfredo Despaigne y el joven Yoelkis Céspedes, hermano de la estrella Yoenis.
Equipo de ensueño
Se quedará como un sueño, pero si Cuba pudiera enviar al Clásico Mundial a todos sus nacionales la novena tendría tanta solidez que partiría como una de las favoritas.
Yasmani Grandal (C- Dodgers), José Abreu (1B-Medias Blancas, Yoan Moncada (2B-Medias Blancas), Yulieski Gurriel (3B-Astros), Aledmys Díaz (SS-Cardenales), OF Yoénis Céspedes (Mets), Leonys Martin (Marineros), Yasmani Tomas (Diamonbacks), Kendrys Morales (DH-Azulejos).
Grandal disparó 27 jonrones e impulsó 72 en 390 turnos con los Dodgers en el 2016.
Abreu ha sido un poderoso artillero desde que llegó a los Media Blancas y tuvo una línea ofensiva de .293-.353-468 el año pasado con 25 cuadrangulares, 100 impulsadas y 32 dobles.
Moncada, ahora de los Medias Blancas a donde llegó como parte del cambio que llevó al as Chris Sale a los Medias Rojas, está proyectado para ser uno de los mejores del juego.
Díaz tuvo 17 H4, 28H2 y llevó 65 al plato en su temporada de novato.
Gurriel debutó y logró .262-292-.385 adjustándose al béisbol de liga mayor después de abandonar su país.
Céspedes es un estelar que en el 2016 se fue profundo 31 veces y empujó 86. Es legendario por sus lances a las bases.
Martin es un sólido jardinero central de gran eficacia defensiva, velocidad en las bases, aunque en sus seis años todavía no ha puesto los números ofensivos que su talento proyectó.
Tomas en apenas su segundo año disparó 31 jonrones y 30 dobles, empujó 83 con slugging de .508 y ahora se coloca como jardinero derecho por encima del temperamental Yasiel Puig, quien sorprendió a todos a su llegada a las Mayores, pero su inconducta y falta de concentración le ha impedido seguir creciendo como jugador.
Morales es un veterano artillero que se ajusta bien al puesto de designado que compartiría (es un sueño) con Despaigne.
El punto débil sería el pitcheo, pues aparte de Chapman los actuales cubanos en las Mayores no sobresalen y José Fernández, una verdadera superestrella falleció el año pasado.
El desangramiento continuará, mientras el sistema dure, y Cuba tendrá que seguir adelante con quienes se queden en la isla.
UN APUNTE
Poderío desaparece
El tradicional dominio cubano en las competencias internacionales se ha visto reducido en las últimas competencias como por ejemplo en los Panamericano que se han tenido que conformar con dos bronces en el 2011 y 2015.
