Opinión

Los sí y los no para invertir

Los sí y los no para invertir

Invertir, esto es producir y negociar en nuestro país, encuentra no pocas resistencias. Sin embargo, hay puntos estimulantes que permiten avanzar. Unos te invitan a seguir con entusiasmo, otros a desistir y devolverte. Vamos a enumerarlos, por paso, indicando factores positivos y negativos. Los costos energéticos, siempre de sumo cuidado, pueden ser manejables o no dependiendo de la región donde opere la empresa. Edenorte parece ser la más razonable y organizada de la distribuidoras de este servicio.

El proceso inicial de registro de marca y constitución de compañía saluda toda iniciativa, invitando a seguir adelante. Pero la aplicación para crédito sofocan y desmotivan al emprendedor más ardiente y decidido.

Cuando penetras a la zona fiscal y aduanal encuentras el colmo de los abusos que, al estilo hitleriano, emplea la Dirección de Aduanas como castigo capital y obstáculo quien ose meterse a importador de materia prima y bienes terminados. Si, a pesar de esta puebla sigues adelante, puedes considerarte un sobreviviente, a la par de los del Holocausto Judío, que para la Aduana representa la Solución Final o tiro de gracia a los importadores.

La búsqueda de mercados, locales y exteriores, se convierte en una tarea atrayente, paliando las insalvables dificultades encontradas en el escabroso tramo descrito previamente.

Para quienes tienen en mente importar y registrar medicamentos, alimentos y otros renglones afines, les recomendamos antes de meterse en eso, darse una vuelta por las oficinas de registros y homologación sanitaria y vegetal. Es un proceso lento, trabajoso y costoso. De igual modo, quienes tienen ganado un espacio en el área de los materiales de construcción, la receta no es otra que tomarse un café con los productores locales o lanzarse con determinación a romper esquemas, leyes y reglamentos en mano.

 

El Nacional

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