MOCA. En esta comunidad se condenó que tragedias como la del domingo, donde dos hermanos fueron muertos a tiros por un cuñado supuestamente, se sigan registrando en el país por asuntos materiales, llevando luto y dolor a las familias.
Mientras que se resaltan las virtudes humanitarias de la familia Jiménez Solorín, cuyos miembros, Olegario y Leonardo, fueron muertos a tiros supuestamente por Abelardo Rafael Núñez, su cuñado.
A este hecho se refirieron el síndico Guarocuya Cabral; el presidente del Colegio Médico Dominicano, filial Moca, doctor Pedro Rodolfo, y el párroco de la iglesia Nuestra Señora del Rosario, padre Pedro Alejandro Batista.
El síndico dijo que se debe llamar a la reflexión sobre el nivel de violencia y confrontación en la sociedad dominicana.
“Los niveles de violencia hasta intrafamiliar, eso es una demostración de que nuestra sociedad debe cambiar los modelos, los patrones de convivencia humana y social”, subrayó el ejecutivo.
Cabral resaltó el respeto de que goza la familia Jiménez Solorín, y unos niveles de sensiblidad social y humana extraordinaria.
Mientras que el doctor Rodolfo expresó que la clase médica mocana está consternada por la muerte trágica del galeno Leonardo Jiménez Solorín.
“El colega y compañero fallecido era muy apreciado entre todos los médicos mocanos. Leonardo era un médico muy respetado en Moca”, manifestó.
Rodolfo aclaró que Leonardo Jiménez Solorín ejercía de médico general, no de ginecólogo como se ha publicado en la prensa, y que el alegado victimario es odontólogo, y no pertenece al gremio.
El padre Batista, también lamentó el hecho y dijo que esto ocurre porque la gente muchas veces no mide la consecuencia de sus actos.
“Los problemas deben resolverse de otra manera, no así con violencia, sino con el diálago, porque compartían en familia, pero había una deuda pendiente, y al parecer tomaban, se originó la discusión que culminó con la lamentable tragedia, según los comentarios”, expresó.
Un apunte
“Los problemas deben resolverse de otra manera, no así con violencia, sino con el diálago, porque compartían en familia, pero había una deuda pendiente, y al parecer tomaban, se originó la discusión que culminó con la lamentable tragedia”, explicó el padre Batista.