¿Qué Pasa?

Madres de sol a sol

Madres de sol a sol

Para muchas mujeres  el ganarse el sustento  diario es una difícil tarea   con la que día a día  tienen que lidiar, con el  objetivo de   asegurarles  la comida  y una mejor educación a sus hijos. Sin importar  que el candente sol les impida mostrar su  belleza estética,  se convierten en madres de sol a sol.

 Cada día Agueda Mateo se ve en la necesidad de  salir de su casa a  las 5:00 de la madrugada  para acudir a la  avenida Ortega y Gasset a vender  periódicos,  para  garantizar  así que sus tres hijas, las cuales deja solas,  tenga   un techo seguro, alimentos y  una mejor educación.

 Madre soltera, tuvo que separarse de su esposo por los maltratos que recibía, dice apenada. “Es mejor sola que mal acompañada,  y yo no le voy aguantar golpes a hombres”, por lo que se ha dedicado a  luchar sola por sus hijas.

 Otra que se gana la vida  en la venta de  periódicos es doña Ivelise Peña, la cual lleva  ocho años en este oficio,  logrando  levantar a sus cuatro hijos. Dos de ellos ya están en la universidad, estudiando   contabilidad y los otros están en  la secundaria. “Los dos más grandes me ayudan, pero poco, porque  tienen  costearse  sus estudios”, comenta Peña. Al igual que Agueda es madre soltera por causa del maltrato.

La historia de  estas mujeres se repite  en Evelyn Sepulveda,  madre de tres hijos,  que se gana la vida vendiendo tarjetas de llamadas en la avenida Independencia. Esta joven tuvo que mandar a dos de sus hijos, mellizos, para donde su abuela paterna porque vivía “arrimada en casa  de mi mamá y no podía tenerlos a los tres juntos”.

Su mayor deseo es poder estar con sus hijos,  lo que espera poder hacer este año. Con los ojos aguados asegura que su único objetivo es  que sus hijos puedan lograr  ser profesionales, lo que ella no pudo porque tuvo que comenzar a trabajar desde muy pequeña.

Indica que no le importa que no pueda arreglarse   porque su belleza esta en el interior.

“Dios es mi fortaleza y mi mayor belleza es poderle servir a él y echar a mis hijos para adelante”, señala.

Con mayor suerte ha corrido Jacqueline Campusano que se gana la vida vendiendo flores en  los alrededores del Mercado Modelo.

 “Tengo muchos años aquí, con esto he podido levantar a mi familia con la ayuda de mis esposo y ya tengo mi casita propia”,  expresa Campusano, quien se levanta diariamente a  las 5:00 de la madrugada.

Bella Virginia Cueva decidió ser vendedora abulante al verse sola  con sus hijos. Narra que tuvo que enviar a la más pequeña para donde su tío porque no podía mantenerla.

“Aquí yo vendo 200 pesos diarios, porque solo estoy aquí hasta el mediodía”, señala. El proximo domingo se celebra en el país el Día de las Madres y el deseo mutuo de todas es  poder ofrecer un mejor futuro que el de ellas, a sus hijos.

El Nacional

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