El Nacional
SCOTTSDALE, Ariz. Abril ha llegado con Manny Ramírez en las jaulas de bateo de Camelback Ranch justo después de la salida del sol, bateando desde un poste. El trabajaría en sus ejercicios de agilidad, sus cosas usuales, en un entrenamiento primaveral que para él y solamente para él- fue breve.
Al llegar el último fin de semana de los juegos de exhibición, Ramírez tiene 21 turnos al bate, 28 apariciones. Probablemente no está ni cerca de los suficientes episodios en el bosque izquierdo, pero quizás nunca los tendrá. El está bateando .476. Eso luce listo.
El firmaría su contrato en la primera semana de marzo, entró en una caja de bateo nueve días después, tuvo un muslo rígido, y ahora está, a unos días del día de apertura sintiéndose…
Tranquilo
El llegó al Scottsdale Stadium con un pesado bulto azul colgado de su hombro derecho. Las trenzas colgando en el centro de su espalda, , tanto que llegarían a la parte alta de los 9 en su uniforme. No solamente los Dodgers instituyeron la Provisión Ramírez, la cual provocó una querella contra las forzadas donaciones caritativas, sino ahora la Excepción Ramírez, la cual estipula que el pelo de Ramírez puede ser sólo tan largo como el fungo más cercano.
El estuvo entre los primeros en el camerino visitante aquí. Haló una silla plegable de metal y esperó por el resto, rebotando una pelota amarilla de softbol en el piso de cemento.
Yo estoy de vacaciones, dijo. Todo lo que quería hacer en el béisbol, ya lo he hecho.
¿Nada más?
Nada, dijo. Si me despierto y estoy saludable, yo estoy bien. Estoy pensando en mantenerme vivo. Eso es todo. Cualquier cosa más, es crédito extra.
Sólo presentarme, dijo. Es la forma como debería ser. Si no funciona, usted regresa el año próximo y hace lo mismo.
