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El líder del Movimiento 14 de Junio, Manuel Aurelio Tavárez Justo (Manolo), dijo en cautiverio a los interrogadores que inquirían informaciones sobre el complot de 1960, que jamás conspiraría contra el régimen de Trujillo.
“El caso nuestro es insólito, pero creo y estoy en la seguridad en lo que a mí respecta, que difícilmente de nuevo incurriré en actividades como la ya mencionada”, declaró.
Estas declaraciones constan en el expediente instrumentado cuando estaba preso en la cárcel de la 40, en el sector de Cristo Rey de la capital. El expediente fue publicado en 1960 por Luis Henríquez Castillo, quien fuera presidente de la Corte de Apelación de Ciudad Trujillo.
Manolo fue arrestado en Montecristi en enero de 1960. Fue brutalmente torturado con algunos de sus aliados en la prisión conocida como “La 40”. Luego fue trasladado a la prisión de Puerto Plata.
Tavárez Justo, según el libro, dijo “Sé que hemos faltado. En la mayoría de nosotros hay o existen personas que por múltiples razones debemos estar íntimamente vinculadas al sistema de gobierno actual presidido por el ilustre generalísimo”.
“Si a ese deber moral, -apunta Manolo- a ese deber social hemos faltado, parte lo atribuyo al entusiasmo y referido a la mala información que teníamos sobre los verdaderos fines que el Movimiento de Liberación Dominicana y probablemente del verdadero conocimiento de la realidad dominicana”.
Añadió que “hemos faltado y soy igual que mis compañeros que así lo han manifestado en repetidas ocasiones, y sabemos que debemos responsabilizarnos por la acción conspirativa llevada a cabo, ya que no solamente constituye la violación a sentimientos de índole personal, sino de índole social que nos vinculan a la situación creada en el país a partir del año 1930.
“Pero si esa actividad fue realizada; si ese entusiasmo se produjo en parte como ya he referido, lo atribuyo a nuestra falta de madurez y de conocimiento de la realidad del país”.
Requirió que “solo nos resta para pedir para nosotros toda la comprensión, toda la generosidad, todo el perdón de que es capaz el corazón bondadoso del ilustre jefe, y dejar constancia de que por encima de los extravíos ideológicos, de las pasiones, de los entusiasmos, está el hombre con su fondo moral indestructible, el hombre como valor humano.
UN APUNTE:
Muerte de las Mirabal
El 25 de noviembre de 1960, mientras su esposa Minerva y sus hermanas Patria y María Teresa Mirabal iban a visitarlo, y sus respectivos esposos que también estaban detenidos, las tres hermanas y el conductor del vehículo en que iban, Rufino de la Cruz, fueron asesinados por secuaces de la tiranía.
“Somos personas jóvenes -indicó- y pensamos prácticamente realizar nuestras vidas. Ojalá tengamos la oportunidad de poder rectificar nuestro error, demostrándolo con hechos precisos que se escapan de toda duda, y servir con toda nuestra convicción, con todo nuestro propósito, con toda nuestra buena intención a la continuidad de la política instaurada por nuestro benefactor de la patria, líder indiscutible del pueblo dominicano”.
Manolo agregó que “el hecho de haber fracasado esta conspiración, es una prueba evidente de la solidez y el respaldo que tiene en la conciencia nacional”.
“Hemos comprendido en estos días la soledad, y hemos meditado sobre muchas cosas que desconocíamos, y entre ellas la verdadera identificación del sentimiento nacional con la política del ilustre jefe, y la imposibilidad y consecuencia en el país de fomentar tipos como ese”, significó.
Manolo salió de la prisión en julio de 1961, tras el ajusticiamiento de Trujillo, que ocurrió el 30 de mayo de 1961. Relanzó el 1J4. Viajó por todo el país para promover la organización, cuyo propósito era cambiar las estructuras políticas y económicas existentes. Participó en la lucha contra el gobierno transitorio tras la muerte de Trujillo.
Manolo apoyó la propuesta del entonces presidente Joaquín Balaguer de formar un gobierno de coalición. Balaguer propuso que los 12 ministerios serían repartidos en los tres partidos de oposición, que incluía el 1J4 y el oficialista Partido Dominicano. Esta propuesta de Gobierno fracasó.
Tavárez Justo proclamó la abstención de su partido político en las elecciones presidenciales del 20 de de diciembre de 1962, que culminaron con la elección de Juan Bosch como Presidente de la República. Criticó la presidencia de Bosch, pero también alertó contra los planes conspiratorios que se estaban desarrollando y que culminaron con el golpe de Estado del 25 de septiembre de 1963. Luego del golpe Manolo fue a la clandestinidad.
El 28 de noviembre de 1963 dirigió una insurrección armada contra el Gobierno del Consejo de Estado, desde el frente guerrillero de Manaclas, en Bonao. Tras el grupo rendirse fue fusilado en diciembre de 1963.
