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“Mi abuelo es el responsable de esta exaltación”

“Mi abuelo es el responsable  de esta exaltación”

Lograr la eternidad deportiva en un país al que vino a jugar por insistencia de Rafael Western y del que casi se marcha frustrado por el bajo rendimiento, es más que un motivo para que Franklin Western sienta orgullo de su abuelo.

Western, uno de los más grandes jugadores que ha tenido el baloncesto a nivel de selección nacional, fue inmortalizado el domingo al Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano, por los gloriosos 15 años que vistió la camiseta tricolor.

“En este día tan especial, quiero recordar y honrar a mi abuelo por ser la persona que me inculcó la dominicanidad y procurar que viniera a jugar al país desde que estaba en la escuela secundaria”, reveló el nacido en Nueva York, del matrimonio del dominicano Franklin Western y la puertorriqueña Nelly Canales.

Franklin aseguró que su abuelo no sólo le inculcó las raíces dominicanas y lo conminó a venir a jugar al país, sino que lo convenció de que no se marchase en 1995 cuando el jugador sentía que no estaba produciendo ni recibiendo minutos de juego con San Carlos, durante el torneo superior distrital de ese año.

“Recuerdo que no estaba jugando muchos minutos y promediando como dos puntos por juego y ya tenía la decisión tomada de marcharse a casa, pero cuando se lo comuniqué, me dijo que me mantuviera tranquilo y trabajara duro hasta lograr que me dieran más tiempo en cancha y así lo hice”.

“Pero estaba frustrado y aún así quería irme a casa en los Estados Unidos. Insistió tanto que escuché su ruego y a los pocos días me convocaron a la preselección nacional.

EL DATO

Rafael Western
Vivió en Estados Unidos, cuando se jubiló vino a su país, pero nunca dejó de tener contacto con su nieto hasta convencerlo de que
viniera a jugar al país.