Santo Domingo.-El secretario general del Movimiento Izquierda Unida (MIU), Miguel Mejía, acuso al estadounidense Roger Noriega, quien fue subsecretario de Estado Adjunto para el Hemisferio Occidental en la gestión de George W. Bush, y antes Embajador ante la OEA (2001-2005, de un plan desestabilizador contra el Gobierno dominicano.
“Tras dedicarse casi a tiempo completo a desestabilizar, condenar y acosa al gobierno constitucional de Venezuela, como antes hiciera con el de Cuba, El Adelantado Noriega está dedicando un espacio mayor de su bien pagada jornada laboral a atizar el fuego de la política interna dominicana, a preparar el terreno para que una combinación de presiones de todo tipo, públicas y secretas, morales e inmorales logren alterar la voluntad de las urnas y los votantes y lleve al colapso al gobierno del presidente Danilo Medina”, dijo Mejía.
A continuación el texto íntegro del documento de Mejía
ROGER NORIEGA, EL ADELANTADO
“El Adelantado Noriega está dedicando un espacio mayor de su bien pagada jornada laboral a atizar el fuego de la política interna dominicana, a preparar el terreno para que una combinación de presiones de todo tipo, públicas y secretas, morales e inmorales logren alterar la voluntad de las urnas y los votantes y lleve al colapso al gobierno del presidente Danilo Medina.” Miguel Mejía, secretario general.
Santo Domingo, R.D.- En la nomenclatura de cargos de la Corona española, un Adelantado era un alto dignatario que llevaba a cabo o movía hacia delante una empresa pública por mandato o servicio real. Ubicado entre el gobernador y el prefecto de la Roma imperial, disfrutaba de una autoridad ilimitada, solo superada por el Virrey o los propios monarcas. En los territorios descubiertos o conquistados, los Adelantados resumían en su persona las funciones políticas, administrativas y militares. En 1494 se otorgó a Bartolomé Colón el título de Primer Adelantado de Indias, renovado en 1515 a favor de su sobrino Diego Colón.
Sin dudas que en la nomenclatura de la burocracia imperial norteamericana corresponde a Roger Noriega el cargo de Adelantado. A este antiguo halcón de la administración de George W. Bush, donde ejerció como Subsecretario de Estado Adjunto para el Hemisferio Occidental, y antes Embajador ante la OEA (2001-2005), quienes realmente mandan en los Estados Unidos suelen asignarles tareas de abrir caminos y mover las fronteras; marcar los blancos a abatir y señalar los territorios a doblegar y conquistar.
Cuando Roger Noriega habla de Cuba, Venezuela, Nicaragua o Irán, por ejemplo, es porque detrás vienen las amenazas, los planes desestabilizadores, las campañas de aislamiento y desprestigio, todo lo que se hace no por simple afán geopolítico, sino por las perspectivas del botín. Porque en el fondo Roger Noriega no es un político, sino un mercader que utiliza herramientas y palancas políticas para lucrar en grande, propiciando que los tiburones del comercio y las inversiones mundiales chapoteen en las aguas cálidas de nuestras playas.
Tras dedicarse casi a tiempo completo a desestabilizar, condenar y acosa al gobierno constitucional de Venezuela, como antes hiciera con el de Cuba, El Adelantado Noriega está dedicando un espacio mayor de su bien pagada jornada laboral a atizar el fuego de la política interna dominicana, a preparar el terreno para que una combinación de presiones de todo tipo, públicas y secretas, morales e inmorales logren alterar la voluntad de las urnas y los votantes y lleve al colapso al gobierno del presidente Danilo Medina. Para esos fines acaba de publicar un artículo calumnioso y canallesco, en el medio digital Interamerican Security Watch, de fecha 18 de los corrientes, titulado República Dominicana: ¿camino a otra Venezuela?
El argumento de este folletín es simple y simplón: el presidente Danilo Medina ha decidido perpetuarse en el poder, y junto a él su partido, para lo cual de manera secreta “… estaría replicando el modelo venezolano”. A manera de ejemplo se aduce”… la selección de los miembros de las Altas Cortes, la reforma constitucional del 2015, el control sobre todos los poderes del país, y los ataques contra los miembros de la oposición, que han sido constantes”. La conclusión a que arriba El Adelantado, no puede ser menos simple y simplona que sus argumentos: “… el gobierno (dominicano) está en camino de convertirse en una dictadura”
Toda esta estridencia manipuladora de Noriega recuerda a los artículos simplistas, simplones y sensacionalistas de Bonillita Aybar contra el presidente Bosch, desde las páginas de su libelo Prensa Libre. Y también recuerda que fueron ruines campañas de desinformación como esas las que empujaron a los militares a dar el fatídico golpe militar del 25 de septiembre de 1963.
¿Qué mueve a Roger Noriega a intentar adelantarse y adelantar las fronteras y los intereses de la geopolítica imperial en el Caribe, construyendo un escenario falso y calumnioso de subversión y desestabilización contra el gobierno del presidente Medina?
Roger Noriega es el dueño principal de una empresa radicada en Washington, que responde al nombre de Visión Américas LLC. Se trata de un lobby organizado con antiguos altos ejecutivos de la USAID, el Consejo de Seguridad Nacional, de grandes fondos de inversión y ex funcionarios del Fondo Monetario Internacional. Su misión declarada es la de utilizar, con fines de lucro, sus contactos políticos, dentro y fuera de los Estados Unidos, para hacer que sus clientes ganen dinero a borbotones.
Se especializan, como era de esperar, en países de América Latina y el Caribe, aunque también se presentan como “expertos en colocar inversiones que robustezcan el sector privado en los países ex socialistas de Europa del Este”. Por último, también se reconocen especialistas en hacer que “…las embajadas norteamericanas en el exterior defiendan y promuevan los intereses de sus clientes y los gobiernos extranjeros les brinden un “trato justo.”
Dicho esto, se transparenta el por qué de las declaraciones de Noriega contra el gobierno dominicano y su forzada comparación con Venezuela. Allá buscan el petróleo. Aquí la refinería, el oro, la construcción de un muro millonario en la frontera con Haití, la posición estratégica en el Caribe y hasta las reservas de agua y biodiversidad, pasando por playas, cruceros y marinas.
No se merece ningún respeto, aún como Adelantado imperial, quien muestra a las claras su calaña de mercachifle jugando con la libertad, la soberanía y la democracia de otro pueblo.
En República Dominicana, como en abril de 1965, la osadía imperial de que hace gala Roger Noriega debe ser enfrentada con la dignidad y el rechazo de todo nuestro pueblo.
