Desde la década de los 30 la psicología ha trabajado arduamente con la evaluación de las distintas formas de manifestación de la inteligencia humana, sobre todo en niños.
Hoy día, más que buscar un coeficiente intelectual, los estudios se centran en el conocimiento de la capacidad del niño o niña para adquirir las habilidades y conocimientos requeridos para su edad, que traducido es: la capacidad del niño para cumplir lo que se le pide en el grado en que está, en la escuela a la que asiste, y en el medio ambiente en el que se desenvuelve.
Para ello se ha creado el Test de las Aptitudes Escolares: TEA (por sus siglas en inglés), lo que podríamos denominar un clásico entre las evaluaciones psicológicas. Va ya por su 11va revisión y ha sido adaptado a población de habla española, desde su original en inglés.
¿Qué mide el test TEA?
– Es fuente de información para tomar decisiones con respecto a la escolarización: qué tipo de método educativo, currículo y ayudas, beneficiarían más al niño en su etapa de aprendizaje.
– Identifica la capacidad verbal, numérica y de razonamiento lógico del niño, por ser habilidades vitales para aprovechar la etapa escolar.
– Reconocer si la niña o niño tiene el potencial para obtener mejores resultados académicos o si por otro lado, tiene una carga escolar superior a su desarrollo intelectual en alguna área dada.
El TEA continúa siendo un excelente instrumento para ser utilizado en centros escolares, ya que además de lo descrito, permite hacer una clasificación de los alumnos de acuerdo a sus necesidades, de manera que puedan proponerse maneras para maximizar el progreso de los mismos.
Por otro lado, los niños de manera individual, ya sea que presenten o no dificultades de aprendizaje, siguen siendo beneficiados mediante la aplicación de este tipo de valoración, ya que muestra no solo el rendimiento actual, si no las probabilidades que tiene el niño de tener éxito en el siguiente nivel del programa escolar e incluso en la enseñanza superior.
El Test de Aptitudes Escolares (TEA) no tiene pérdida. Es por eso, que hoy por hoy, es uno de los instrumentos de mayor alcance y repercusión en donde el proceso de enseñanza y aprendizaje es tomado de manera seria y responsable, algo que definitivamente necesitamos.
