CARACAS, VENEZUELA, (AP).- El candidato opositor independiente Henri Falcón pidió el viernes al secretario general de las Naciones Unidas que se pronuncie sobre las elecciones presidenciales de mayo en Venezuela, que han sido cuestionadas por algunos países de la región y por la Unión Europea.
Ante las posiciones encontradas que ha generado la eventual participación de la ONU como observador de los comicios venezolanos, Falcón afirmó en conferencia de prensa que valdría la pena un pronunciamiento de António Guterres.
El candidato independiente, de 56 años, dijo que está a la espera de una respuesta del organismo para un posible encuentro con Guterres.
El mandatario y candidato a la reelección, Nicolás Maduro, reiteró el viernes, durante un acto en el centro la capital, la acusación de que Estados Unidos estaría presionando para que el secretario general de la ONU no atienda la petición que realizó el gobierno venezolano sobre el envío de una misión de observadores para las elecciones del 20 de mayo. Washington y otros gobiernos de la región han cuestionado los comicios y anticipado que no reconocerían sus resultados.
Maduro dijo, dirigiéndose a Guterres, que los reglamentos de la ONU le facultan para designar comisiones de observación electoral a cualquier proceso sin necesidad de pasar por “ningún paso burocrático” de la Asamblea General o el Consejo de Seguridad.
El gobernante criticó al alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad al-Hussein, que cuestionó esta semana la situación de los derechos humanos en Venezuela y expresó preocupación por la falta de condiciones mínimas para unas elecciones libres y creíbles.
“Es un hombre militante de la derecha fascista venezolana”, dijo Maduro al referirse a Zeid, al que señaló de ser una “pieza del Departamento de Estado”.
Asimismo, el mandatario acusó al secretario de Estado, Rex Tillerson, el encargado de negocios de la Embajada de Estados Unidos en Caracas, Todd Robinson, y la oposición venezolana de promover un “golpe de estado militar”, e instó a los seguidores del gobierno a salir a las calles en el caso que se dé alguna rebelión militar.
La elección presidencial también ha sido rechazada internamente por la coalición opositora y varias organizaciones civiles, agrupadas en el llamado Frente Amplio Venezuela Libre, que llamaron para el 12 de marzo a una marcha hacia la oficina de la ONU en Caracas para pedir a ese organismo que no convalide los comicios a los que consideran un “fraude”.
Falcón, quien a inicios de mes rompió con la alianza opositora para inscribir su candidatura, indicó que insistirá en la conformación de una misión de observadores internacionales “amplia” y “calificada” en la que podría participar la ONU, la Unión Europea, el Mercosur y otras organizaciones.
Los tres partidos minoritarios que apoyan a Falcón y las organizaciones que respaldan a Maduro suscribieron la semana pasada un convenio para la postergación de los comicios presidenciales previstos originalmente para abril y la realización de manera simultánea de las elecciones de consejos legislativos y municipales.
El acuerdo también contempla que las partes propondrán al secretario general de ONU la conformación de una delegación de acompañamiento y observación de todas las fases del proceso y se garantizará la equidad en el acceso de los candidatos a los medios públicos y privados de comunicación.
Falcón es el principal contendor de peso de Maduro, quien a pesar de tener un respaldo que ronda 20% figura como favorito para lograr la reelección.
En la elección solo participarán Maduro, Falcón, el pastor evangélico Javier Bertucci, el empresario Luis Alejandro Ratti y el ingeniero Reinaldo Quijada.
