Santo Domingo.-Grandes amenazas atentan hoy día contra la unidad de la Iglesia católica mientras los propios sacerdotes lamentablemente caen en el individualismo que arropa a la sociedad moderna, afirmó el sábado el arzobispo metropolitano de la Arquidiócesis de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria.
Sostuvo que la Iglesia no puede dar señales de divisiones internas porque Cristo no está dividido.
Citó que el apóstol San Pablo reprocha las divisiones internas en la iglesia cuando “mientras uno dice yo soy de Pablo y el otro, yo soy de Apolo”, (1cor.3,4).
“Este ideal de comunión no puede quedarse en bonitas palabras ni en un ideal que no aterriza. Tenemos grandes obstáculos y amenazas contra ese ideal”, dijo Ozoria al pronunciar la homilía en la Catedral Primada de América donde fueron ordenados 10 nuevos sacerdotes.
Lamentó que el tecnicismo y el materialismo práctico separan y distraen cada día a presbíteros y laicos en la Iglesia y los llevan cada día a tratar de obtener bienes personales.
“El individualismo imperante en la sociedad moderna, el tecnicismo creciente que nos va separando cada día más, el materialismo práctico que nos lleve a atesorar bienes personales, la falta de una actitud de trabajo en equipo y una visión limitada de la Iglesia. Pensar que mi parroquia o mi comunidad o mi grupo es la Iglesia”, son de los males que afectan la Iglesia católica, según monseñor Ozoria.
Sostuvo que se impone dar pasos concretos de unidad, “no queremos oír frases como estas: esta es carismática, esta parroquia es catecúmena, este padre es catecúmeno, este padre es diocesano”.
“El presbítero en nuestra Arquidiócesis tiene que ser un signo de unidad, como pide Jesús en su oración sacerdotal: “Que todo sean uno, como tú, Padre, está en mí y yo en ti; que también ellos sean uno en nosotros”, consideró el religioso.
Para el arzobispo metropolitana de Santo Domingo, la relación del obispo y sus sacerdotes debe entenderse en el marco de la doctrina del cuerpo místico de Cristo.
“Lo mismo decimos de la relación de los presbíteros entre sí. Ellos forman parte de un mismo cuerpo, participan del sacerdocio de Cristo y de su triple misión de santificar, enseñar y pastorear, por ello la identidad del presbítero de una diócesis, arquidiócesis tendrá que ser la fraternidad, la comunión y la corresponsabilidad”, explicó.
Los ordenados
Ozoria manifestó su alegría por la ordenación de nuevos sacerdotes que desde hoy se integran a trabajar en distintas parroquias de la arquidiócesis de Santo Domingo.
Los presbíteros ordenados son Antonio Pozo Pina, Juan Luis Rojas, Juan Francisco Hilario Abad, Francesco Cognigni y Juan Antonio Cabrero Rodríguez.
También Diego Alejandro Rosales, Moisés Pérez Villa, Milthon Fernando Girón Plaza, Jean Dieudonne y Félix Jonás Martínez Peralta, este último que estará destinado a la diócesis castrense.
En el acto solemne de ordenación estuvieron presentes los familiares de los nuevos curas, quienes proceden de Italia, Argentina, México, Haití, Estados Unidos, y Colombia.
Ozoria estuvo acompañado de los obispos auxiliares monseñores Ramón Benito Ángeles, Jesús Castro Marte y Faustino Burgos Brisman.
A la actividad asistieron representantes del cuerpo diplomático, así como autoridades civiles.
