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Parqueos, espacios de discordia que muchas veces termina en discusiones y muertes

Parqueos, espacios de discordia que muchas veces termina en discusiones y muertes

Ya es algo normal en barrios y calles del Gran Santo Domingo ver casas y establecimientos comerciales formales e informales con indicaciones u objetos que los propietarios colocan para impedir que se estacionen vehículos frente a sus locales o viviendas, porque dificultan el acceso o la movilidad en sus frentes.
Huacales de refrescos, sillas plásticas, letreros, gomas de carro, tanques, latas con cementos, conos lumínicos, entre otros objetos son puestos en los frentes y laterales de casas y establecimientos comerciales en procura de prohibir que personas que no tengan nada que ver con el inmueble estacionen sus vehículos, dificultando el libre acceso de las personas que deseen acceder al lugar.
El Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo han crecido de manera desorganizada y sin ningún tipo de planificación urbanística por lo cual se ven las calles atestadas de vehículos en ambos sentidos de cualquier vía. Muchos vehículos son estacionados en frentes de casas, establecimientos comerciales, encima de las aceras y hasta en aéreas verdes, ya que pocos negocios tienen parqueos para sus clientes.
Muchos barrios capitalinos se han convertido en centros de pequeños negocios informales que venden todo tipo de mercancía, productos y servicios, operando en establecimientos que no están adecuados para estos fines y sobre todo porque aparte de no tener estacionamientos, tampoco disponen de zonas de carga y descarga de mercancías.
Diariamente en días laborables los habitantes de algunas zonas, los negocios del área y los clientes que visitan esos establecimientos se ven involucrados en una especie de pandemónium. Los clientes al no tener donde estacionarse lo hacen en frente de viviendas u otros negocios. A sí que muchos comercios han tomado la decisión de poner obstáculo para que solo sus clientes se parqueen.
Dueños de viviendas se sorprenden porque desde la primeras horas de la mañana hasta las ultimas de la tarde los frentes de sus casas son secuestrados por individuos en vehículos que llegan, se estacionan, van a algún lugar regresan y se marchan, pero de nuevo es ocupado por otro. Lo peor de todo es que pasa todos los días, a todas horas, durante todo el año.
Sí, estacione
Muchas personas tienen la falsa creencia de que por el simple hecho de tener un auto y una marquesina, nadie se debe estacionar frente a su casa; y la verdad es que las calles y aceras son del uso de los ayuntamientos y de todos los ciudadanos siempre y cuando no haya prohibiciones sobre el particular.
Según la ley, como conductor se tiene el derecho de estacionarse en cualquier parte de la ciudad, inclusive si no es en el frente del propio domicilio o negocio, siempre y cuando no haya una entrada de vehículo o garaje en el lugar que quede bloqueada.
Lamentablemente el problema de los aparcamientos más que un problema de índole municipal es un inconveniente de índole socio-educacional, de sentido común y de convivencia con el entorno. Ya que aunque no esté prohibido estacionarse en tal o cual lugar, la sensatez debe motivar a analizar donde o no hacerlo, ya sea por la característica de la vía o del inmueble frente al cual se hará.
Letreros de Zona de Descarga, No Estacione, Entrada de Camiones, o entradas de emergencias de centros médicos, así como de zona policial o militar, etc., prohíben el parqueo en estas aéreas. Fuera de esto, nadie está autorizado a prohibir estacionarse en la vía pública.
“Entrando las calles en el dominio público y no pudiendo ser registrado esos espacios a favor de una persona en particular, en principio ni propietario de viviendas, de negocios, ni ciudadanos comunes pueden impedir que un ciudadano se estacione en una calle, ni se le puede cobrar por estacionarse”, Waldys Taveras, exregidor.
No Estacione
Según el Artículo 237 de la Lay 163-17, los conductores no podrán estacionar o detener un vehículo en las vías públicas en forma tal que se estorbe u obstruya el libre tránsito, o cuando por circunstancias excepcionales se haga difícil y arriesgado el fluir del mismo.
No podrán estacionarse frente a una boca de incendio o hidrante, sobre un paso de peatones o lugares destinados exclusivamente al tránsito de los mismos, en doble fila, respecto a otro vehículo parado o estacionado en una vía pública, en los túneles, puentes, pasos a desnivel, cuestas, curvas de las vías, etc.
En conclusión La Ley 63-17 específica donde no se puede estacionar un vehículo, lo que quiere decir que se podrán usar como parqueos todos lugares públicos que no tengan una prohibición para hacerlo. Aunque es normal ver vehículos parqueados en lugares con prohibición.
Ocupación de aceras
Es posiblemente el problema más importante que deben enfrentar las autoridades de los ayuntamientos, de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (DIGESETT) y de Ministerio de Medio Ambiente, ya que esta práctica se ha convertido en un cancel que afecta la gran mayoría de barrios y sectores capitalinos.
La ocupación irregular de los espacios públicos aceras, calles y áreas verdes, en donde se instalan comercios, vendedores, talleres, etc. viola los mandatos y normas de Medio Ambiente establecidos en la Ley 64-00 sobre Medio Ambiente. También violan la Ley 176-07, en las ordenanzas que rigen los ayuntamientos.
Cabe destacar que la Ley 63-17 de Movilidad, Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial, en sus artículos del 144 hasta el 154, es clara en cuanto al tema de la ocupación de espacios públicos dificultando el tránsito de vehículos y peatones.
Algunos ejemplos
Ensanche La Fe
Es un sector, ubicado en el centro del Distrito Nacional, de un gran crecimiento económico formal e informal, lo que ha creado un trastorno en el desenvolvimiento normal de las actividades hogareñas de toda la vecindad.
Diariamente desde las primeras horas de la mañana todas las calles y partes de las aceras son ocupadas por los negociantes del sector, a tal punto que transitar a pie o en vehículos se ha convertido en un gran problema.
Talleres de mecánica, desabolladora y pintura, y centro de ventas de piezas para carros entre otros negocios que no tienen espacio para operar, usan las calles y aceras como centro de operaciones lo que crea un enorme desorden a toda hora del día.
Villa Juana
Villa Juana es un barrio de gente laboriosa, pero al igual que otros sectores capitalinos, la informalidad en asuntos de negocios se ha convertido en su diario vivir. Aparte de que es el lugar ideal para conseguir partes de vehículos.
Los talleres de frenos, mecánica, eléctricos, tintados de cristales, etc. Se han encargado de adueñarse de todas las aceras y frentes de viviendas, muchos de los dueños de casas prefieren hacerse de la vista gorda y así evitar cualquier tipo de inconvenientes.
Villa Consuelo
Es el caso más deprimente de ocupación de espacios públicos, en donde todas las calles y aceras son usadas de manera indiscriminada por cualquiera. Lugareños, comerciantes, clientes, parecieran estar todos de acuerdo en que el desorden y la tolerancia es lo ideal para hacer negocio y la convivencia pacífica.
Todas las calles y aceras ya son parte de los negocios del área que las usan no solo como depósito de mercancías o centro de almacenaje, sino también que son habilitadas para fabricar o reparar lo que sea.
Gascue y Naco
Siendo dos de los sectores más exclusivos del Distrito Nacional, no escapan a esta realidad de ocupación de calles e irrespeto a la señalización de No Estaciones. El problema de estas zonas es que el crecimiento de la ciudad y las construcciones de edificaciones privadas y gubernamentales sin parqueos ha trastornado todo el libre tránsito.
El inconveniente de Gascue se ha convertido en un problema de índole social ya que ha motivado que muchos propietarios quieran vender sus inmuebles por lo inhabitable de la zona. Calles intransitables llenas de vehículos parqueados a ambos lados de las vías, son el diario vivir.
Y como si esto fuera poco, individuos que comercializan con los espacios (parqueadores) en frente de casas y a todo lo largo de las calzadas alquilando lugares para parqueos. Todo esto se hace sin que ninguna autoridad se dé por enterada.

El Nacional

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