República Dominicana debe abordar una visión estratégica del desarrollo manufacturero, debido a que de la misma manera “que no se pueden mantener incentivos para toda la vida”, tampoco es posible que las compras gubernamentales no estén dirigidas a fortalecer el aparato productivo nacional, planteó hoy la vicepresidenta ejecutiva de la Asociación de Industrias.
Circe Almánzar de la misma manera que planteó que una empresa debe mantener ventajas fiscales por un período de tiempo determinado que les permitan incertarse adecuadamente en el mercado, dijo debe haber un encadenamiento con los sectores económicos claves, como el turismo, con la agropecuaria y la industria local.
Uniformes
La ejecutiva de la AIRD, al participar esta mañana en el programa Matutino 11, por Telesistema donde conversó con Ramón Núñez Ramírez y Jacqueline Morel, puso de ejemplo de la no existencia de una visión estratégica y falta de coordinación, la decisión del Ministerio de Educación de cambiar los uniformes escolares.
Estimó que esa decisión, con una inversión de miles de millones de pesos, mostró que hacer el cambio de uniformes de tela (que se producen en el país) por otro tipo de tela que deberá ser importado, va en detrimento de la industria nacional, que prácticamente quedó fuera del proceso.
Dijo que como ese hay decenas de ejemplos en que las proclamas sobre simplificación de los procesos abundan, frente a una realidad burocrática que las desdice.
Almánzar valoró los esfuerzos del presidente Danilo Medina por estimular el desarrollo de la agropecuaria, pero llamó la atención que mientras el mandatario hace ese esfuerzo, “para tu exportar una piña debes durar seis meses sacando permisos”.
Sin embargo, valoró los pasos que se han dado, como es la creación del Consejo de Competitividad, que es un espacio de intercambios entre los sectores público y privado.
Ley partidos
Almánzar consideró “una pena tener que hablar de la ley de partidos, dedicando tanto tiempo a la discusión de un tema coyuntural”.
Estimó que lo fundamental es el tema del financiamiento a los partidos. Lo demás, a su juicio, son temas propios de los partidos, estimó que son éstos, quienes deben ser sus dirigentes y representantes, las cualidades que se les debe exigir.
OMSA
Sobre el desfalco en la Oficina Metropolitana de Servicios de Transporte (OMSA), que podría superar los tres mil millones de pesos, dijo que es una muestra de la carencia de institucionalidad en el país, ya que no es posible cometer tantas irregularidades, por tanto tiempo, sin una complicidad coordinada, incluso de los organismos encargados de la supervisión del gasto público.
Almánzar llamó la atención de que los mayores escándalos de corrupción “han ocurrido en instituciones que no tienen nada que hacer, que no aportan, que nadie está pendiente de lo que se hace ahí”.
UN APUNTE
Consecuencias
La vicepresidenta ejecutiva de la Asociación de Industrias dijo que el caso de la OMSA como todos los demás ocurridos en los últimos tiempos, indican que el país vive una “crisis de no consecuencias. Donde nadie tiene el temo a violar las leyes, e incumplir sus obligaciones”.
