¿Chantaje?
El “escándalo de Año Nuevo” no ha tardado en convertirse en una ruidosa confrontación entre el Ministerio Público, la magistrada que otorgó los permisos especiales a los presos con motivo de las navidades y la Corte de Apelación de San Cristóbal.
En tanto la juez Katherine Rubio Matos ha rechazado las irregularidades que se le han atribuido, la presidenta de la Corte de Apelación de la provincia, María Garabito Ramírez, calificó el revuelo con la decisión como parte de un plan de la Procuraduría General de la República para dañar la imagen del Poder Judicial.
Además de acusar al Ministerio Público de ni siquiera presentar a los presos en audiencias, tildó como un acto de chantaje el escándalo que se ha creado con los permisos especiales a presos vinculados al narcotráfico. La versión fue calificada de “exageradamente cruel, dañina, inexacta, mendaz y plagada de malicia”.
