Página Dos

PRIMERA FILA

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Arbitraje
Si el Gobierno decidió acudir al arbitraje entablado por Odebrecht en una corte de Nueva York es porque está seguro de que es ilegal el reclamo de 708 millones de dólares de la firma para la construcción de las plantas de carbón de Punta Catalina.

Si en principio se pensó que las reclamaciones de la constructora eran parte de un juego mediático, el curso tomado por el diferendo ofrece otra connotación del conflicto.

El proceso implica unos costos con los que tendrá que cargar la parte que lo pierda. El Gobierno sabe el compromiso que asume por el efecto negativo que tendría no salir airoso en la disputa con la constructora brasileña en torno a una obra y un proceso tan cuestionado.

Pero, si en vez de negociar, decidió acudir al arbitraje, como informó el vicepresidente de la Corporación de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), Rubén Bichara, es porque cree que ganará.

El Nacional

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