El Nacional
El procurador general de la República, doctor Radhamés Jiménez Peña, defendió ayer la actuación de la Policía Nacional, en relación a la muerte a tiros de varias personas en alegados intercambios de disparos.
La Policía trabaja a requerimiento de la sociedad, dijo el representante del Ministerio Público cuando se le preguntó su parecer por el alto número de personas ultimadas por agentes del orden público.
Jiménez Peña dijo que los delincuentes han actuado de manera desafiante, razón por la cual las autoridades no pueden quedarse de brazos cruzados.
Manifestó que varios policías y civiles han muerto a manos de delincuentes.
El doctor Jiménez Peña respondió de esa manera al ser preguntado sobre el elevado número de personas, mayormente jóvenes, ultimados a tiros en supuestos intercambios de disparos.
Diversas organizaciones han criticado que al menos 18 personas hayan muerto en tiroteos con miembros del cuerpo del orden desde el 29 de diciembre.
El 29 de diciembre pasado fueron muertos en la avenida de la Salud casi a esquina Luperón, Bárbaro Monegro, de 45 años; Nolis Alfredo Pérez, de 30; Edanio Poché, de 20; Carlos Manuel Leyba Hernández, de 29 y Gaudis Herrera Martínez (El Gallo), de 22.
La Policía dijo que el grupo atacó a los integrantes de una patrulla que se acercó hasta un automóvil Honda en el que estaban en el citado parque.
La Policía dijo que el grupo se dedicaba a robar camiones cargados de mercancías y autobuses de la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses.
Sin embargo el transportista Juan Hubieres, presidente de la Federación Nacional de Transporte la Nueva Opción (Fenatrano), salió en defensa de tres de los ultimados.
El primero de enero tres hombres fueron muertos a tiros en Santiago en la pollera Pérez, en la avenida Pedro M Hungría y en un apartamento en la avenida Yapur Dumit.
Ese mismo día en La Romana el teniente de la Policía, Apolonio de la Cruz, mató a tiros a Ricardo Castillo, de 21 años, cuando en estado de embriaguez se negaban a retirarse de un colmado en el barrio Villa Verde.
En tanto que, en San Cristóbal, el raso Johana Escoboso de los Santos, mató a tiros a su vecino Juana Sayé Bautista, de 32 años, durante una discusión por asuntos de tragos en la comunidad de San Rafael, en Hatillo.
Mientras que el 2 de enero en Puerto Plata fueron muertos a tiros por una patrulla de la Policía, los hermanos Ruddy y José Cabrera Peña, de 24 y 21 años.
Aunque la Policía asegura que los dos jóvenes eran delincuentes, sus familiares, organizaciones comunitarias, vecinos y allegados niegan tales versiones, precisando que se trató de una ejecución.
En los últimos días también han caído agentes policiales y militares en enfrentamientos con delincuentes.
