Opinión

PUNTOS… Y PICAS

PUNTOS… Y PICAS

¿Más de lo mismo?

 

De nuevo la opinión pública es dominada por otro escándalo de corrupción con gran despliegue de prensa, revelación de detalles delictivos, mención de presuntos implicados y la friolera de más de tres mil millones de pesos despilfarrados, según datos oficiales de la auditora Cámara de Cuentas.

En la memoria reciente se registran, en las gestiones gubernamentales del Partido de la Liberación (PLD), los casos en “limbo jurídico” de corrupción en Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (OISOE), en venta de terrenos del Consejo Estatal del Azúcar y de la Corporación de Empresas Estatales (Corde), para citar solo tres.

Al poco tiempo, después del despliegue en prensa y satisfacción del morbo mediático, los casos se diluyen, se olvidan y no hay nada concreto como régimen de consecuencia y de respuesta condigna a gravedad del hecho. La Procuraduría General de la República revela que fueron dilapidados más de tres mil millones de pesos en la última gestión, datos que servirán para la acusación por actos delictivos, conflictos de intereses y conversión de funcionarios en suplidores de la misma OMSA.

Este nuevo escándalo de corrupción se destapa cuando un grupo de persona ligadas al organismo son procesadas por el asesinato del abogado y catedrático Yuniol Ramírez, trama de sicarios que sugiere prácticas mafiosas al peor estilo italiano.

El destape de la auditoría ojalá no sea otro espectáculo de entretenimiento mediático como muchos que surgen y se olvidan, por no existir régimen de consecuencias para hechos punibles que hieren la sensibilidad porque perjudican el erario.

El Nacional

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