Tras los resultados de las elecciones de mayo, ahora el tema se centra en la repartición del pastel gubernamental que corresponde al cuatrienio 2016-2020.
Los dirigentes de las fuerzas políticas aliadas al peledeísmo madrugaron poniendo a circular rumores sobre el gabinete que acompañará a Danilo Medina a partir del 16 de agosto.
En el proceso de distribución de cargos y canonjías nadie se quiere quedar atrás y surgen las apuestas, y es que quien no esté en los medios podría quedar en el olvido.
Partidos pequeños todos, incluyendo a un PRD que disminuyó su caudal de votos en casi un 40% con relación a los últimos comicios, buscan protagonismo en la prensa a fin de estar en los oídos del mandatario.
Pero la pregunta que se hace la gente común, me imagino que la cúpula del Gobierno y el partido oficial también, es sobre la base de qué aportes los aliados reclaman posiciones de principalías en el nuevo gabinete.
Imaginen qué habría pasado si la boleta del PRD en vez de Danilo hubiese tenido el rostro de Miguel Vargas Maldonado
Sin embargo, mirando el pasado escenario electoral desde la grada, se puede llegar a la conclusión de que muchos de los partidos que apoyaron a Danilo Medina, lo que hicieron fue aprovechar la ola de popularidad del mandatario que siempre estuvo por encima del 60%, y de esa forma tener un buen desempeño.
La mayoría de los partidos que respaldaron la reelección de Medina lo que hicieron fue aprovecharse de él, y si no es así tome uno de ellos de referencia, a cualquiera y quítele el rostro del mandatario de la boleta, luego piense si los resultados hubiesen sido los mismos.
Pero si queremos tener un caso más concreto, qué habría sido del PRD si en vez de la cara de Danilo en la boleta blanca hubiesen colocado el rostro de Miguel Vargas. Es casi seguro que ese 5,8% que sacó se habría reducido a un 1%, que era lo que le daban las encuestas en el mes de abril.
En conclusión, son los perredeístas quienes deben estar agradecidos de Danilo y son ellos los que le deben el favor de mantenerle la personería jurídica. Danilo no necesitaba al PRD para ganar, pero los perredeístas necesitaban al mandatario para evitar la vergüenza electoral y alcanzar el ansiado 5 por ciento.
