Pierde fuerza caso Odebrecht
La liberación de seis de los ocho que apelaron la prisión que se les impuso por los supuestos sobornos que recibieron de Odebrecht plantea más conjeturas sobre el desenlace del proceso.
La Procuraduría General de la República, que había celebrado la prisión como un triunfo, saborea una amarga derrota con la sentencia de la Segunda Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia. Solo el empresario Ángel Rondón y el exministro de Obras Públicas, Víctor Díaz Rúa, no consiguieron que el tribunal modificara el año y los nueve meses de prisión que respectivamente se les impuso de coerción.
Además del componente jurídico, la Procuraduría ha quedado en desventaja en la batalla de opinión pública desde el mismo proceso de investigación para identificar y procesar a los imputados por el escándalo. Aunque tienen que pagar una fianza, cumplir con presentación periódica y no podrán salir del país, la sentencia que libera a Temístocles Montás, Andrés Bautista, Máximo D’Oleo, César Sánchez, Ruddy González y Radhamés Segura derriba los argumentos del Ministerio Público para justificar la prisión.
Para despejar las suspicacias que han rodeado el caso, la Procuraduría parece compelida a profundizar las investigaciones, que dijo que no estaban cerradas, pero con pruebas más contundentes para evitar que el caso termine diluyéndose. El consorcio Odebrecht admitió que de 2001 a 2015 pagó 92 millones de dólares a través de Rondón para la adjudicación de obras.
