Diferencias
Ajuste fiscal
El ajuste fiscal que sugiere el Fondo Monetario Internacional (FMI) por la supuesta vulnerabilidad que plantea para la economía el crecimiento de la deuda no ha tardado en arrojar diferencias en la cúpula del Gobierno.
En modo alguno se puede pasar por alto que mientras funcionarios tan influyentes como el ministro administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta, opone al ajuste la eficiencia de las recaudaciones a través de una persecución más implacable de la evasión, el de Economía, Isidoro Santana, sostiene que se está en una disyuntiva.
Si bien Santana no refrendó de manera tajante la recomendación del FMI e incluso resaltó los esfuerzos que atribuye al Gobierno, concluyó en que las acciones son insuficientes y en que en algún momento se tendrá que pensar en otro tipo de disposición.
Descartado de antemano que el Gobierno se decante por la reducción del gasto para enfrentar el déficit, Santana destacó que no queda otra opción que aumentar los ingresos por vía de la reforma que plantea el FMI.
Otras explicaciones se reducen a un mero ejercicio teórico, porque de lo que en esencia se trata es de la disyuntiva en que está el Gobierno con los ingresos para afrontar la deuda, que ya representa alrededor del 50% del Producto Interno Bruto (PIB).
Consciente del costo político que representa la reducción del gasto y del nivel de las evasiones, Peralta percibe que por esta última vía se pueden mejorar las recaudaciones sin necesidad de un impopular ajuste fiscal. Aunque cualquier decisión esté por verse.
