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Exhibe fuerza

Contra aborto

 

El aborto no es un problema religioso, pero con la soberbia demostración que exhibieron las iglesias católica y evangélica el domingo con su movilización frente a la sede del Congreso sus opiniones tienen que ponderarse en cualquier decisión que se adopte. No son dos o tres obispos los que, como podía suponerse, rechazan la despenalización de la interrupción del embarazo por cualquier causa, sino una numerosa feligresía.

El aborto es en esencia un problema de salud, que para muchos especialistas debería condicionarse a algunos motivos, pero la oposición de la intervención de la Iglesia católica le ha dado otra connotación. Al observar la reforma del Código Procesal Penal, el presidente Danilo Medina favoreció que se permitiera la interrupción del embarazo en los casos de incesto, riesgo para la vida de la madre o por muerte de la criatura.

Pero la contundente oposición de la Iglesia a cualquier causa ha prolongado la decisión de los congresistas sobre el espinoso tema. Muchos de los que objetan la despenalización no lo hacen con más criterio que el religioso. Y esa postura cuenta. República Dominicana y Nicaragua están entre los contados países en la región y el mundo en que el aborto está penalizado por cualquier motivo.

Con la demostración de fuerza de las iglesias católica y evangélica es obvio que cualquier decisión tendrá que ser bien sopesada, si es que no se llega a un acuerdo entre los que favorecen y los que se oponen a la despenalización condicionada.

El Nacional

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