La imposibilidad de llegar a un acuerdo dentro del Comité Nacional de Salarios para el reajuste, que debió ocurrir en marzo, ha dado como resultado que los asalariados hayan perdido ya tres meses sin recibir un incremento en sus ingresos, en momentos en que la mayor parte de los aumentos de precios afecta los sectores de menores ingresos e ingresos fijos.
Desde antes de que el Comité Nacional de Salarios fuese convocado formalmente, ya se conocían las posiciones tanto de los empleadores y de los trabajadores, las cuales no han variado lo que ha impedido el logro del consenso necesario.
Los empleadores, a través de la Confederación Patronal (Coopardom), han sugerido un reajuste de un 12 por ciento para el salario mínimo y dejar a la discreción de los patronos los reajustes a sus trabajadores a partir de ese monto.
Los sindicatos, agrupados en la Confederación Nacional de la Unidad Sindical (CNUS), han planteado que el reajuste sea hasta quienes ganan 30 mil pesos.
Este último planteamiento, según Copardom, escapa a las atribuciones legales del Comité Nacional de Salarios, que sólo puede legislar sobre el salario mínimo.
Las conversaciones incluso se abandonaron.
La presidenta de Copardom, Marisol Vicens, propuso esta semana a los sectores gubernamental y al de los trabajadores a reanudar en el menor plazo posible las discusiones sobre salario.
El sector empleador privado espera que puedan vencerse los escollos que han impedido que los empleados se puedan beneficiar del aumento salarial que ayudará a la reanimación de la economía con la inyección de los casi RD$58 mil millones que representa el aumento propuesto por éste, dijo.
Igual planteamiento han realizado el vicepresidente de la República, doctor Rafael Alburquerque, y el secretario de Trabajo, doctor Max Puig.
El vicepresidente dijo: Yo entiendo que si el nivel de inflación en los sectores más bajos ha sido muy superior al 12% y yo espero, aun cuando el 12 ha sido la franja que han propuesto los empresarios, sabemos que en el Comité Nacional de Salario siempre hay una negociación.
Dijo que ese incremento es esperado por todos los trabajadores, especialmente en este momento de crisis mundial en que es necesaria la protección de los asalariados y los sectores más vulnerables de nuestra sociedad.
Mientras que Puig destacó que el reajuste no es sólo un acto de justicia, sino también un acto de necesidad económica.
La importancia del salario mínimo se debe a que más del 85 por ciento de los asalariados del país se encuentra en esa franja.
De acuerdo con el Banco Central, los dos quintiles de menores ingresos son los más afectados con los aumentos de los precios de los combustibles y los alimentos, debido a que son los que deben dedicar la mayor parte de sus ingresos a resolver esas necesidades.
Las buenas intenciones expresadas por todos con relación a la necesidad del reajuste salarial, debieron de concretarse en los plazos propuestos, ya que éstos nunca tienen efecto retroactivo.
Patronos
Plantean un reajuste de un 12 por ciento a partir del salario mínimo y dejar los otros niveles a que los decida cada empesa en particular.
Trabajadores
Quieren un reajuste hasta los 30 mil pesos y que el Comité de Salario pueda legislar sobre salarios hasta los niveles libre de impuestos.