El Nacional
El Instituto Duartiano rechazó ayer conceder la ciudadanía a los haitianos o cualquier extranjero indocumentado y conceder amnistía a los ilegales radicados en el país, y advirtió que se inferiría una estocada mortal a la soberanía.
Asimismo, consideró que los haitianos tienen que someterse a los procesos jurídicos establecidos, sin que se ponga en peligro la seguridad del Estado ni se ataque la identidad nacional.
El presidente de la entidad, profesor José Joaquín Pérez Saviñón, entiende que el Reglamento General de Migración número 285-04 tiene que ser presentado al país, y advirtió que ninguna política del mismo puede verse sobre una amnistía a ilegales, ya que la Suprema Corte de Justicia ha sentado el criterio de que de una situación de ilegalidad no puede nacer derecho.
Al hablar en rueda de prensa junto al vicepresidente del Instituto Duartiano, doctor Wilson Gómez Ramírez, Pérez Saviñón explicó que el problema migratorio tiene que ser tratado bajo el mayor nivel de serenidad y ecuanimidad. Igualmente, rechazó cualquier tipo de presión para tratar ese tema, y menos aún si procede de entidades, personas o instituciones extranjeras. Advirtió que la aprobación del reglamento implicaría la masiva presencia ilegal extranjera.
Insistió en que las consecuencias del reglamento van más allá de las que puedan advertir las personas que impulsan su aprobación., porque la soberanía recibiría una estocada mortal.
Enfatizó en que el Instituto Duartiano se opone radicalmente a que sea aprobado y ejecutado ese reglamento
Recordó que Duarte planteaba que siendo la independencia nacional la fuente y garantía de las libertades patrias, la ley suprema del pueblo dominicano es y será siempre su existencia política como nación libre e independiente de toda potencia extranjera.
Apoyó al canciller Carlos Morales Troncoso, en cuanto a que una amnistía agravaría la situación, pues envía un mal mensaje a futuros inmigrantes ilegales, que apostarían a tumbar el pulso a la Ley de Migración.
Advirtió que hay 8 millones más de haitianos detrás de la frontera, y que los dominicanos no tienen ninguna culpa de la situación haitiana.