BARAHONA.- El decreto emitido por el Poder Ejecutivo que declara de emergencia los trabajos de desmonte y preparación de tierras para los afectados del lago Enriquillo, reivindica la dimensión de una tragedia prevenible en las provincias Independencia y Bahoruco. Esa es la consideración del ingeniero agrónomo Héctor David Vólquez Román, ex administrador del ingenio Barahona, quien dijo que lo que ha pasado es pequeño frente a lo que se esta gestando, con el desvío de las aguas de inundaciones del río Yaque del Sur a la laguna Rincón de Cabral y de ahí al lago Enriquillo.
El pasado viernes, el presidente Leonel Fernández emitió el decreto 674-11, en el cual, además de agilizar el trabajo de desmonte, ordenó la instalación de red de riego y construcción de cercas para evitar los daños a los cultivos por el desborde del lago. La consecuencia que pone en riesgo mas de 3 mil 500 kilómetros cuadrados ubicados en la Hoya del lago Enriquillo, porque las aguas desbordadas, han elevado el nivel de alrededor de 12 metros vertical hacia arriba, apuntó. El agrónomo Vólquez Román dijo que ya se ha planteado el traslado de la comunidad de Boca de Cachón en Jimaní, mientras que los científicos que han tratado el tema, señalaron que Duvergé que esta a 8 metros bajo el nivel del mar tenia que ser traslado, como Galván y el Salado de Neiba.
El Presidente, en una forma apropiada, inteligente ha emitido este decreto, donde plantea que se van a liberar todas las restricciones que pone la ley 340-06, sobre la compra del Estado y la ley 344-04, que trata sobre las asignaciones de obras, puntualizó. El ingeniero Vólquez Román dijo que la dimisión que el Presidente Fernández es la que realmente tiene lo que se llama la cascada ecosistema representado en la laguna Rincón, lago Enriquillo, los humedades de Duvergé y el río Yaque del Sur.
El decreto del jefe del Estado indica que el desborde del lago Enriquillo ha afectado a cientos de miles de tareas agrícolas y ganaderas en las provincias Independencia y Bahoruco.
cerca de una veintena de equipos pesados trabajan en la rehabilitación de 33,000 tareas ubicadas en El Espartillar de Duvergé y Boca de Cachón de Jimaní, donde el Gobierno reubicará a 500 productores agrícolas y ganaderos afectados por las crecidas del lago Enriquillo. Se recuerda que las aguas del lago Enriquillo se mantienen en continuo crecimiento, lo que ha provocado que las comunidades asentadas en sus entornos estén preocupadas por su futuro. Ganaderos de la zona dijeron que solo en las localidades Vengan a Ver, Duvergé y Las Baitoas hay 85 mil tareas para ganado y agricultura anegadas, pero desconoce la extensión afectada en la zona de Boca de Cachón, Las Clavellinas, Postrer Río y otros lugares de la provincia Independencia. Las 33 mil tareas son dotadas de sistema de riego y de energía eléctrica.
