NAGUA. Un estudiante universitario de 20 años, hijo de un casacambista de aquí fue secuestrado anoche en casa de su novia, por varios hombres que portaban armas largas y chalecos antibalas, que se hacían pasar por miembros de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).
El secuestrado es Eduardo Antonio Baldera Gómez, hijo del casacambista Francisco Eduardo Baldera, de 48 años, y de la señora Hilda Gómez, muy conocidos en esta ciudad.
El joven fue secuestrado cuando se hallaba en casa de su novia en la calle Manolo Tavárez Justo número tres del sector Doraliza.
Tres hombres con armas largas largas penetraron a la vivienda y le dijeron al joven que estaba detenido por órdenes del coronel Escolástico Suesbio Acosta, comandante policial de esta ciudad.
Los secuestradores obligaron al joven a montarse en su vehículo, una camioneta Toyota Four Runner negra.
La novia del estudiante dijo que ella iría también y que no lo dejaría sólo, y también la montaron en la camioneta.
Posteriormente la novia de Baldera Gómez fue dejada abandonada en las cercanías de Pimentel, donde fue socorrida por varias personas.
El padre del joven dijo que se hallaba en Santo Domingo cuando se produjo el secuestro.
Manifestó que fue informado por teléfono del hecho, por lo que se comunicó con su abogado para que acudiera a la Policía creyendo que realmente se se trataba de un apresamiento.
Relató que su abogado le comunicó luego que el joven no había sido requerido por la Policía, por lo que presumía que se trataba de un secuestro.
El casacambista informó que hasta las 10:00 de la mañana de este sábado nadie se había comunicado con él para exigirle nada ni para decirle dónde tenían a su hijo.
Baldera es propietario de una casa de cambio en esta ciudad y otra en Samaná, donde su hijo trabaja y a donde viaja todos los días.
El joven secuestrado es estudiante de la regional de la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
En las investigaciones del caso participan oficiales de la Policía especializados en secuestro.
Mientras tanto, agentes policiales requisan distintas zonas de las provincias María Trinidad Sánchez y Duarte, con el objetivo dar dar con el paradero del estudiante.
Efectivos del Ejército también participan en la búsqueda y han sido apostados a las entradas y salidas de esta ciudad.
El secuestro de Baldera Gómez ha causado consternación en la región, ya que se trata de un estudiante hijo de una familia muy querida.
